Lima. (EFE).- Tres momias intactas de hace 1.300 años
pertenecientes a la cultura Wari, una de ellas ya bautizada como "La
Dama de la Máscara", acaban de ser descubiertas en pleno barrio
residencial de Lima, en la pirámide precolombina conocida como Huaca
Pucllana.
Las momias fueron presentadas hoy por Isabel Flores, jefa del
equipo de arqueólogos, quien destacó que es la primera tumba
completa descubierta desde que comenzaron a trabajar hace 27 años en
este complejo, que era entonces basurero de la ciudad y escenario de
paseos en bicicleta, partidos de fútbol o criadero de cerdos.
Esto convierte el descubrimiento, en palabras de la propia
Flores, en "el premio a toda una vida de trabajo".
La arqueóloga recuerda con emoción el momento en que comprobaron
el tesoro que habían tenido la suerte de encontrar y el "impacto
que generó en arqueólogos y obreros" la máscara intacta de uno de
los fardos, a la que ya todos llaman "La Dama de la Máscara".
"Tiene unos ojos muy fijos y parecen muy fuertes", relató Flores,
al describir los ojos grandes y azulados realizados, según la
tradición de los Waris, con conchas marinas.
Los propios arqueólogos llevaron a cabo el desentierro con enorme
respeto, incluso con pequeños ritos, como ofrendas de hoja de coca y
de chicha, una bebida tradicional andina que se hace con maíz.
La tumba, descubierta durante los trabajos de restauración de la
pirámide, está compuesta por tres fardos funerarios que contienen
tres momias de personas adultas enterradas en posición fetal junto a
su ajuar, así como los restos óseos de un niño, sacrificado como
ofrenda.
Estos sacrificios de niños y mujeres jóvenes eran habituales,
"parte de sus ritos y ofrendas dentro de su concepción de
culto a los dioses", explicó Flores.
Entre 1997 y 2001 se descubrieron en este mismo yacimiento restos
de trece fardos funerarios, y en 2005 partes de una momia decapitada
y de otros tres niños.
Sin embargo, todas las tumbas habían sido saqueadas, una
costumbre que se remonta, según Flores, a la época de la colonia,
cuando los españoles hacían a los nativos buscar ansiados metales
preciosos como el oro.
Cuando no encontraban nada, como es el caso de la Huaca Pucllana,
dejaban las tumbas en mal estado, con lo que se perdía una
importante información para los arqueólogos.
El descubrimiento permite sumar nuevas piezas al rompecabezas que
es la historia de la capital peruana, donde las diferentes culturas
se superponen en los complejos arqueológicos.
La Huaca Pucllana es el perfecto ejemplo: un centro ceremonial
levantado en adobe -que es una mezcla de barro y conchas
marinas- entre el año 200 y 500 después de Cristo por la cultura
Lima, una sociedad de agricultores y pescadores que luego dieron
paso a los invasores Waris hacia el año 700 y los ichmas tres siglos
después.
Cada cultura ha dejado su legado en los diferentes niveles de
esta pirámide truncada, que creció y se adaptó a cada una de ellas,
como muestra el lugar del nuevo hallazgo: una plataforma para las
autoridades durante las ceremonias de la cultura Lima, que luego los
Waris utilizaron como sitio funerario.
Tras el descubrimiento, aún queda un largo y meticuloso trabajo
de investigación.
Lo primero, explicó Flores, es realizar placas de rayos X a los
fardos, algo para lo que será necesario que alguna clínica de la
capital peruana ceda desinteresadamente sus equipos a los
arqueólogos.
Luego será necesario encontrar un nuevo hogar para las momias
recién descubiertas, ya que el complejo la Huaca Pucllana carece de
un lugar adecuado para su conservación.
"Lo necesitamos ya a gritos", reclama Flores. De no conseguirlo,
el próximo destino de "La Dama de la Máscara" puede ser el almacén
del complejo.
http://www.lavanguardia.es/lv24h/20080826/53527878360.html