ESTA EN TERRENOS DE LA ANTIGUA CAMPSA Y ES LA TERCERA DE ESTE TIPO ENCONTRADA EN LA CIUDAD.
Tres personas trabajan en las excavaciones.
Foto:EL PERIODICO
Tenía,
entre otros espacios, obrador, hornos, piletas para el barro y
cobertizos.Se ubicó lejos del río, algo peculiar, y abasteció a Mérida
en el Alto Imperio.
07/05/2008 P. CABECERA
Las excavaciones que se han realizado en un solar de 700 metros
cuadrados ubicado en las antiguas instalaciones de la Campsa han sacado
a la luz una industria de alfarería romana que mantuvo su actividad
desde el cambio de era hasta el siglo II. Así aparece recogido en el
boletín Foro , que edita el Consorcio de la Ciudad
Monumental. Los trabajos, dirigidos por los arqueólogos Eulalia Gijón y
Miguel Alba, han documentado diferentes partes de una misma instalación
industrial que experimentó, al menos, tres reformas importantes, en
relación con la producción cerámica.
La excavación empezó el pasado verano y finalizó en marzo. Se
ha centrado en unos terrenos localizados fuera de la ciudad romana, en
el espacio comprendido entre el tramo de muralla que circunvala el
anfiteatro y el circo romano, en un lugar donde se extendió un gran
área funeraria en época romana.
Las partes identificadas son un obrador para trabajar a
cubierto, unas piletas para preparar el barro, una superficie empedrada
para su mezclado, otra con un pavimento preparado para orear la
producción al aire libre, dos hornos, varios cobertizos y otras
dependencias que pudieron servir de vivienda a los artesanos. Además,
se han documentado unos barreros o cortes de los que se extrajo arcilla
y varios depósitos de cascotes con desechos de producción que permiten
conocer qué tipo de materiales fabricó el taller.
El Consorcio explica que por el contenido de los vertederos se
ha podido conocer que en esa industria se trabajó conjuntamente
material constructivo y cacharrería común: teja plana, teja curva,
ladrillos de diferentes tamaños, piezas para levantar columnas, ollas,
cazuelas, botellas, jarras, cuencos, morteros, etcétera. La producción
iba básicamente dirigida al abastecimiento local, tanto de la ciudad en
construcción como de las vasijas de mayor consumo para el normal
desarrollo de la vida cotidiana.
CASI UNA DOCENA En Mérida se conocen casi una docena
de instalaciones semejantes de época romana, la mayoría localizadas en
la zona sur. El descubierto de ahora equivale al tercer taller en la
ciudad dedicado a la alfarería y el tejar, pero es el mejor conocido
por la extensión excavada y tiene la peculiaridad de su ubicación,
alejada del río, aunque con una zona abundante en agua (indispensable
para este tipo de industria), algo que fue clave para elegir este lugar
y para mantenerse en funcionamiento durante el Alto Imperio.
http://www.elperiodicoextremadura.com/noticias/noticia.asp?pkid=372139