MEXICO - Hallados restos arqueológicos del pasado azteca en una zona marginal de México - 07.06.08
La zona, que albergaba un importante mercado de drogas, armas y piratería, escondía en su subsuelo yacimientos de enorme valor
México. (EFE).- Un solar del barrio marginal de Tepito, en
Ciudad de México, que hasta hace un año albergaba un importante
mercado de drogas, armas y piratería, escondía en su subsuelo restos
arqueológicos que demuestran el humilde pasado de sus habitantes
aztecas y de la época colonial.En febrero de 2007 el gobierno capitalino desmanteló en ese área,
conocido como "La Fortaleza", un conjunto de 144 viviendas populares
en el que se comercializaban a diario un promedio de ocho kilos de
cocaína y media tonelada de marihuana.
Situado en Tepito, uno de los principales centros capitalinos de
contrabando y piratería, en el inmueble se hallaron entre otros
objetos cajas fuertes, muros falsos, peculiares murales con Pancho
Villa fumando droga, reservas con botellas de cognac y champán, e
incluso algún jacuzzi.
Un año y medio después, el solar de 7.000 metros cuadrados, ya
vacío, estaba preparado para convertirse en un centro comunitario de
atención a las necesidades del barrio, que se calcula atenderá a
50.000 personas por año.
Pero para ello debía someterse primero a un "salvamento"
arqueológico a manos del Instituto Nacional de Antropología e
Historia (INAH), ya que, como la gran mayoría de los terrenos del
Centro Histórico de Ciudad de México, su subsuelo esconde un
manantial de historia.
El INAH, que comenzó sus trabajos en abril de este año, ha
encontrado ya un entierro completo de un niño de entre 4 y 5 años
acompañado de dos cajetes -similares a platos hondos-, y un collar
con tres cuentas, una de ellas de obsidiana pulida en forma de
cabeza de pato, algo típico en los enterramientos infantiles
aztecas.
Los restos del niño son analizados por antropólogos forenses para
determinar su edad exacta y sexo.
El arqueólogo responsable de la zona, Jorge Cabrera, explicó a
EFE que era típico de esta cultura enterrar a las mujeres debajo del
fogón del hogar y a los niños cerca.
Cabrera y su equipo han hallado también un basurero asociado
probablemente a la familia del pequeño, en el que han aparecido
pequeños objetos de gran importancia arqueológica porque muestran
cómo se vivía a finales del siglo XV en esta zona acuífera.
Fragmentos de cajetes y molcajetes (matraz de piedra para moler
especias); cuencos y platos con diseños que representan águilas,
serpientes, flores y grecas; malacates para hilar; fragmentos de
sahumadores (utensilios para ahumar), flautas y sonajas, así como
figuras de distintas deidades de la cultura azteca son algunos de
estos restos.
Asimismo, al excavar se han encontrado elementos constructivos de
las casas prehispánicas, como adobe y piedras talladas.
También han sido descubierto núcleos y navajas pequeñas de
obsidiana, manos de metate (piedra para moler), agujas hechas de
hueso o espinas de pescado, y punzones para la construcción de redes
de la época que va de 1100 a 1521, además de restos de peces.
Cabrera indicó que todos estos utensilios revelan que esta región
era humilde y vivía de la pesca o de actividades relacionadas con el
lago.
La capital mexicana fue fundada en 1521 y cimentada sobre el
centro de la gran Tenochtitlan, ciudad y centro ceremonial azteca,
que se encontraba asentada en un islote y las riveras de un gran
lago.
La colonia española también llegó a la región donde se encuentra
actualmente Tepito, como revela el relleno hallado, utilizado para
desecar la rivera del lago durante dos siglos, compuesto es su
mayoría por lebrillos, que son cuencos de barro utilizados por los
hospitales y los conventos para contener líquidos.
Éstos poseen monogramas y letras del alfabeto griego, flores y
figuras geométricas en el fondo asociadas a cofradías o a los
propios conventos.
Sobre éstos se encuentran los cimientos de los edificios
construidos en la zona durante los siglos XVII y XVIII, aunque la
mayoría fueron derruidos en el terremoto de 1985, en el que murieron
al menos 10.000 personas, y fueron sustituidos por nuevos edificios,
como el de la "Fortaleza".
Como curiosidad, los arqueólogos hallaron también varios restos
que señalan la presencia de una fábrica de cristal -probablemente
canicas- en las cercanías.
En los trabajos de campo, que seguirán los próximos tres meses,
Cabrera confía en hallar más entierros humanos.
http://www.lavanguardia.es/lv24h/20080605/53475181733.html