Ocho nuevos sitios, desde el Estrecho de Malacca a Papua Nueva Guinea y San Marino inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO
- © UNESCO / Milos Dudas
- Iglesias de madera de la parte eslovaca de los Cárpatos (Eslovaquia)
El Comité del Patrimonio Mundial de la UNESCO, reunido en
Quebec, añadió en la mañana del 7 de julio ocho nuevos sitios a la
Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Con estas inscripciones,
Papua Nueva Guinea y San Marino entran por primera vez en la Lista del
Patrimonio Mundial.
Los nuevos sitios inscritos son:
Melaka y George Town, ciudades históricas del Estrecho de Malacca (Malasia) son
el producto de más de 500 años de intercambios comerciales y culturales
entre Oriente y Occidente, en el Estrecho de Malacca. Las influencias
de Asia y Europa han dotado a estas ciudades de un patrimonio
multicultural particular, tanto tangible como intangible. Sus edificios
gubernamentales, iglesias, plazas y fortificaciones son testimonio de
las primeras fases de la historia de Melaka, que comenzó bajo el
sultanato malayo, en el siglo XV, así como de los periodos portugués y
neerlandés, a principios del siglo XVI. Los edificios residenciales y
comerciales de George Town atestiguan por su parte la herencia del
periodo británico, a partir de finales del siglo XVIII. Ambas ciudades
poseen una arquitectura única y un paisaje urbano sin parangón, tanto
en el este como en el sureste de Asia.
Antiguo sitio agrícola de Kuk (Papua Nueva Guinea). Este
sitio abarca 116 hectáreas de terrenos pantanosos del sur de Nueva
Guinea situados a unos 1.500 metros de altura. Las excavaciones
arqueológicas han mostrado que estos humedales fueron cultivados casi
sin interrupción desde unos 7.000 a 10.000 años atrás. En Kuk se
conservan, en muy buen estado, vestigios del salto técnico cualitativo
que transformó el mero aprovechamiento de las plantas en agricultura
hace unos 6.500 años. El sitio es un ejemplo excelente de la evolución
de las prácticas agrícolas a lo largo del tiempo, desde el cultivo en
montículos a orillas de los pantanos hasta el drenaje de éstos mediante
la excavación de zanjas con aperos de madera. Kuk es uno de los pocos
sitios del mundo donde los vestigios arqueológicos muestran el
desarrollo autónomo de la agricultura a lo largo de un periodo tan
largo.
La llanura de Stari Grad (Croacia) en la isla
de Hvar, en el Adriático, es un paisaje cultural agrícola que ha
permanecido prácticamente intacto desde que fue colonizado por primera
vez por griegos jónicos llegados de la isla de Paros en el siglo IV a.
de C. La arquitectura original de esta fértil llanura, donde se
cultivan sobre todo vides y olivos, se ha mantenido desde la época
griega hasta la actualidad. Es también una reserva natural. Su paisaje
incluye muros antiguos de piedra y ornamentos, como pequeños refugios
de piedra que dan testimonio del antiguo sistema geométrico de división
de tierras utilizado en la Antigüedad por los griegos, la chora, que ha
permanecido prácticamente intacto durante más de 24 siglos.
Fortificaciones de Vauban (Francia). Este sitio
está compuesto por 13 grupos de edificaciones y sitios fortificados
situados en las fronteras norte, este y oeste de Francia, que
constituyen el mejor ejemplo de la obra del ingeniero militar de Luis
XIV, Sébastien Le Prestre de Vauban (1633-1707). Abarca ciudades
creadas ex nihilo, ciudadelas edificadas en terreno llamo, murallas de
ciudades con bastiones, varias torres-baluartes y una torre atípica,
así como una mansión, fuertes de montaña y fuertes costeros, una
batería de montaña y dos estructuras de comunicación en zona montañosa.
Estas construcciones se inscriben en la Lista del Patrimonio Mundial
por ser representativas del periodo de apogeo de la construcción de
bastiones clásicos, característica de la arquitectura militar
occidental. Vauban ocupa un puesto importante en la historia de la
arquitectura militar defensiva y la influencia de sus obras se extendió
hasta el continente americano, Rusia, Turquía y el Extremo Oriente.
Bloques de viviendas modernistas de Berlín (Alemania). Este
sitio comprende seis inmuebles de viviendas que atestiguan la política
innovadora en materia de hábitat urbano aplicada en Berlín entre 1910 y
1933, sobre todo en tiempos de la República de Weimar, cuando la
capital alemana desempeñaba un papel de vanguardia en el plano social,
político y cultural. Estos inmuebles constituyen un ejemplo notable del
movimiento en pro de la construcción de nuevas viviendas sociales, que
contribuyó a mejorar el alojamiento y las condiciones de vida de
personas de ingresos modestos gracias a la adopción de planteamientos
innovadores en la planificación urbanística, la arquitectura y el
diseño de jardines. Estas viviendas son ejemplos excepcionales de
realizaciones urbanísticas y arquitectónicas de nuevo tipo,
caracterizadas por sus soluciones inéditas en materia de diseño y sus
innovaciones técnicas y estéticas. Bruno Taut, Martin Wagner y Walter
Gropius figuran entre los arquitectos principales de estas
edificaciones, que tuvieron una importante repercusión en la
construcción de viviendas sociales en el mundo entero.
Mantua y Sabbionetta (Italia). Situadas al
norte de Italia, estas dos ciudades son representativas de dos aspectos
del urbanismo del Renacimiento. Mantua constituye un ejemplo de
renovación y extensión de una ciudad ya existente, mientras que
Sabbionetta, situada a unos 30 kilómetros, es ilustrativa de las
teorías renacentistas sobre la planificación de la ciudad ideal. Aunque
algunas partes de su tejido urbano son regulares, el trazado irregular
de Mantua atestigua las distintas etapas de su crecimiento desde la
época del Imperio Romano. Esta ciudad posee numerosos monumentos
medievales –entre los que figura una rotonda del siglo XI– y un teatro
barroco. En cambio, Sabbionetta, construida en la segunda mitad del
siglo XVI por orden de Vespasiano Gonzaga Colonna, se puede definir
como una ciudad de un solo periodo con un plano en forma de damero.
Ambas ciudades aportan un testimonio excepcional de las realizaciones
urbanísticas, arquitectónicas y artísticas del Renacimiento, dictadas
por la visión y las ambiciones de la familia gobernante de los Gonzaga.
La importancia de los dos sitios estriba en el valor de su arquitectura
y en su eminente papel en la difusión de la cultura renacentista. Los
ideales de ésta, promovidos por los Gonzaga, han quedado plasmados en
la morfología y la arquitectura de ambas ciudades.
Centro Histórico de San Marino y Monte Titano (San Marino). El
sitio cubre 55 hectáreas e incluye el monte Titano y el centro
histórico de la ciudad, que data de la fundación de la república como
ciudad-estado, en el siglo XIII. San Marino se inscribe en la Lista del
Patrimonio Mundial como testimonio de la continuidad de una república
libre desde la Edad Media. La zona inscrita incluye fortificaciones,
torres, murallas, puertas y bastiones, así como una basílica neoclásica
del siglo XIX, conventos de los siglos XIV y XVI, el Palazzo Publico
del siglo XIX y el Teatro Titano, del siglo XVIII. El bien representa
una centro histórico todavía habitado que preserva todas sus funciones
institucionales. Gracias a su emplazamiento en la cima del monte
Titano, la zona no se vio afectada por las transformaciones urbanas
ocurridas desde el princpio de la era industrial hasta la actualidad.
Iglesias de madera de la parte eslovaca de los Cárpatos (Eslovaquia). Este
sitio inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial comprende dos
iglesias católicas romanas, tres iglesias protestantes y tres iglesias
ortodoxas griegas, que fueron erigidas entre los siglos XVI y XVIII en
aldeas pobres de una región conocida antaño por el nombre de Alta
Hungría. Construidos en madera, los templos de este sitio son una
excelente muestra de la riqueza de la arquitectura religiosa local,
marcada por la impronta del encuentro entre la cultura bizantina y la
latina. Estas iglesias presentan diferencias tipológicas en su planta,
espacio interior y aspecto exterior, que se deben a la diversidad de
las prácticas religiosas. Además, atestiguan la evolución de las
principales corrientes arquitectónicas y artísticas predominantes en el
periodo de su construcción, así como la interpretación y adaptación de
las mismas a un contexto geográfico y cultural específico. Las paredes
y techumbres de su interior están ornamentadas con pinturas y todas
ellas poseen obras de arte que enriquecen su valor cultural.
En la sesión de esta mañana, el Comité aprobó también la ampliación del sitio de los Ferrocarriles de Montaña de la India, con
la inscripción del ferrocarril Kalka Shimla Railway, de 96 km de
recorrido. Se trata del único monorraíl construido a mediados del siglo
XIX todavía en funcionamiento. Viaja a la localidad de Shimla, situada
a gran altitud.
- 07-07-2008
- © UNESCO/POP-EYE / Thomas Bartilla -