Guissona recupera el espacio del Palau Fluvià a partir de un campo de trabajo para jóvenes
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El Ayuntamiento de Guissona, el Punt d’Informació Jove y el Museu Eduard Camps han organizando conjuntamente un campo de trabajo para jóvenes que se está llevando a cabo estos días en el Palau de Fluvià, uno de los edificios emblemáticos del patrimonio arquitectónico y histórico de la población que, en origen, debía convertirse en el Palacio Episcopal de los Obispos de Urgell en el siglo XVI.Su construcción se inició en el año 1505 por iniciativa del Bisbe d’Urgell Pere de Cardona, aunque la obra se detuvo el 1514, después que el obispo fuera ascendido y trasladado a Tarragona. Del palacio, que debía constar de planta baja y dos pisos, sólo se llegó a construir el primer nivel.
Aunque la obra no se acabó, alguna parte fue utilizada como iglesia de
Santa Llúcia y Sant Jordi hasta el año 1808, cuando fue parcialmente
destruida por las tropas francesas que allí se fortificaron. Una vez
expulsados los franceses, las autoridades hicieron derrumbarlo para
evitar que el ejército galo volviera a hacerse fuerte entre sus muros.
Los trabajos de este primer campo de verano cuentan con la
participación de siete jóvenes, los cuales, bajo la supervisión del
Museo de Guissona, se dedican a la limpieza del monumento y a la
recuperación de fragmentos de piedras esculpidas y elementos
ornamentales caídos y repartidos por los diferentes espacios del
monumento.
Inicialmente los trabajos debían finalizar el pasado viernes, pero el
interés de los participantes en recuperar este elemento emblemático del
patrimonio de Guissona ha hecho que se haya decidido ampliar el campo
de trabajo hasta este próximo 1 de agosto.
