EL CAIRO, Egipto- En la tumba del faraón. - El Periodico
El Cairo quiere
expropiar a 20.000 familias que viven en el cementerio de los antiguos nobles
egipcios en Luxor. El valle solo podrá ser visitado por arqueólogos y turistas.
Los habitantes de las aldeas de Al Gurna, en Luxor, están
que echan chispas. Bajo los cimientos de sus humildes casas de adobe se
esconden las tumbas de los nobles del antiguo Egipto. Han convivido con ellas
durante decenios, pero eso se acabó.
El Gobierno de El Cairo ha resuelto poner en marcha el
viejo proyecto de recuperar la zona para los arqueólogos y los turistas, lo que
supone demoler las casas y realojar a los vecinos. A principios de diciembre,
los bulldózers se llevaron por delante la primera vivienda. Un aviso de que la
cosa va en serio. "De aquí no me saca nadie, solo muerto", afirma
indignado Mahmud, uno de los vecinos.
Al Gurna está situada
en el margen occidental del Nilo a su paso por la antigua capital imperial de
Tebas, hoy Luxor, uno de los centros turísticos más importantes de Egipto. En
total viven unas 20.000 familias de escasos recursos económicos que sobreviven
gracias a los extranjeros. El proyecto de desalojo implica trasladar a los
lugareños a un nuevo complejo de viviendas, construido para la ocasión, situado
a 20 kilómetros del conocido como Valle de los Nobles.
A pesar de que las nuevas
viviendas disponen de agua corriente y luz eléctrica, servicios de los que
carecen las actuales, la propuesta del Gobierno no acaba de convencer a los
guarnawis. Primero, porque las casas son mucho más pequeñas, de apenas 80
metros cuadrados, y hay familias de más de 15 miembros, y después porque Al
Gurna Al Gadida --así se llama el nuevo pueblo-- está fuera de la ruta
turística. Pero el argumento de más peso es quizá el sentimental."
Aquí hemos vivido durante
generaciones. Mi abuelo fue durante muchos años el guardián del Rameseum
complejo mortuorio de Ramés II", afirma Mohamed Snake, que regenta un
pequeño y acogedor hostal en Sheij Abd al Gurna, una de las aldeas afectadas.
"Me ha costado muchos años de esfuerzo y trabajo levantar este negocio, y
si me voy de aquí lo perderé todo", añade.
La aldea donde nació Snake se
extiende a lo largo y ancho de la ladera de una colina desértica. Desde el
hostal se divisan el Rameseum y los colosos de Memnón, y si uno se asoma a la
cima de la colina puede apreciar con claridad, del otro lado, el majestuoso
templo de Hatsepsut. El establecimiento está situado junto a la tumba de
Sennefer, que fue gobernador de Tebas bajo el reinado de Amenofis II, uno de
los faraones del Imperio Nuevo, hace más de 3.000 años.
Como la mayoría de las casas de
Al Gurna, las paredes del hostal de Snake --serpiente, en inglés: el apodo se
lo pusieron sus padres porque de niño era muy delgado-- están pintadas de
colores cálidos, como el celeste, y con dibujos faraónicos. "Nosotros
somos los primeros interesados en conservar y proteger la herencia de nuestros
antepasados", afirma. Y recuerda que fueron los vecinos del lugar los
primeros en movilizarse cuando, en 1997, terroristas islámicos asesinaron a 60
turistas en Hatsepsut.
Nuevos
misterios.
Para las autoridades, limpiar la
zona es una necesidad urgente. Los expertos sostienen que la vida diaria sobre
los yacimientos ha deteriorado las tumbas, y además creen que las entrañas de
las colinas esconden sorprendentes misterios todavía por desvelar. Hay quienes
van más lejos y acusan a los lugareños de saquearlas. "El desalojo es
necesario para combatir el pillaje", declaró Ahmed al Tayed, jefe de la
comisión encargada de censar a la población de Al Gurna. Pero los últimos
ladrones conocidos datan de hace más de 150 años.
El director del Consejo Supremo
de Antigüedades de Egipto, el arqueólogo Zahi Hawass, ha advertido que oponerse
al proyecto es "estar en contra de la preservación y protección de la
herencia de Egipto". En todo caso, se prevé mantener algunas casas, las
más tradicionales, y varios talleres de alabastro. El desalojo del Valle de los
Nobles es el desplazamiento de gente más importante en la historia moderna de
Egipto, después del que tuvo lugar en los años 60 para construir la presa de
Asuán.
Fuente: El Periódico.