Estudiosos de Alemania apuntan que una sequía mundial puso fin a la civilización maya y a la dinastía Tang de China al mismo tiempo - La Cronica de Hoy
Por: Rigoberto Aranda |
Jueves 4 de Enero de 2007 | Hora de publicación: 00:52 |
Vestigios. Las construcciones de ambas culturas son muestra del avance y desarrollo de la cultura maya y de la dinastía Tang en China. |
Vivieron su resplandor simultáneamente con medio mundo de distancia, y
un severo cambio climático provocó sus caídas respectivas en pocas
décadas. Una nueva teoría sugiere que la declinación de la dinastía
Tang en China y de la civilización maya en México tuvo su origen en una
sequía mundial, de acuerdo con investigadores alemanes que encontraron
evidencias.
Además, la dinastía china tiene fechado su fin en el año 907, mientras
que los calendarios mayas —aún más exactos— culminan en el 909.
En la extensa investigación publicada en la revista Nature participaron
científicos del Geoforschungszentrum de Potsdam, Alemania, y colegas de
la Academia de Ciencias China, así como expertos en geociencias de las
estadunidenses universidades de Princeton y Miami.
En conjunto, encontraron un fenómeno de balancín entre la intensidad
del verano y los monzones de invierno en China en los últimos 16 mil
años.
Por ello, los desplazamientos del cinturón de lluvias tropicales
documentados en China y Centroamérica entre los años 700 y 900 de
nuestra era contribuyeron al declinar tanto de la dinastía Tang en el
país asiático como a la del período clásico de la civilización maya,
explicaron.
Ese fenómeno indica desplazamientos de las bandas de lluvia tropicales
a tenor de la variabilidad climática en el Atlántico Norte.
“Resulta intrigante, escriben los científicos, que el surgimiento y
posterior declinar de la civilización maya clásica coincidiese con la
edad de oro y la decadencia de la dinastía Tang en China”, señalan esos
expertos.
La comparación de los sedimentos de titanio en el lago Huguang Maar, en
el sureste de China, y en la cuenca de Cariaco, en Venezuela, y de
zonas costeras de México, revelan similitudes, entre ellas una
tendencia general hacia un clima más seco hacia el año 750 y una serie
de tres sequías prolongadas.
La última de estas sequías coincide con el colapso definitivo de la
civilización maya así como con el fin de la dinastía Tang, señalan los
científicos.
Según éstos, es posible que una serie de variaciones en la posición de
la llamada Zona de Convergencia Intertropical, franja de bajas
presiones en la zona ecuatorial, sirviesen de catalizador de eventos
simultáneos ocurridos a civilizaciones a uno y otro lado del Pacífico.
Cambios de alto impacto. Tanto en Asia como en Centroamérica se dio un
cambio climático que provocó fenómenos migratorios a gran escala, en el
Holoceno tardío, y este cambio se encuentra inscrito en las
estalagmitas de cuevas chinas que permiten medir las precipitaciones
monzónicas de verano con gran exactitud.
La variación de la Zona de Convergencia Intertropical explica una
sequía intensa y prolongada en las hoy muy fértiles zonas mayas,
difícil de creer por ser hoy zonas arqueológicas rodeadas de selvas
tropicales.
Sin embargo, en su momento, provocaron una drástica declinación de la
producción agrícola y la disponibilidad de agua, que resultaron
críticas para ambas culturas, que vivían su pleno apogeo.
El monzón Asia-Australiano es un componente importante del clima del
planeta, y ha sido ampliamente documentado su influencia en la
actividad social y comercial de más de la mitad de la población
mundial, que vive en esa zona del mundo.
Por ello se recurrió a la cantidad de titanio y a sus características magnéticas como indicador de ciclos hidrológicos remotos.
El papel de los cambios climáticos y ambientales en el éxito y
declinación de las sociedades es objeto de un intenso debate,
especialmente si se trata de sociedades tan complejas como la dinastía
china y la civilización maya, cuya influencia y poder se extendía en
amplias regiones.
Sin embargo, la paleoclimatología ha demostrado que los ciclos
dinásticos chinos sí tienen relación temporal con los periodos de clima
adversos asociados al monzón.
El enigma maya. Es conocido por los expertos mexicanos que el clima
debió tener graves consecuencias para la agricultura en el área maya,
como lo tuvo también en las tierras altas del Altiplano.
Puesto que culturalmente estas catástrofes eran atribuidas a la
inefectividad de la clase sacerdotal, la gente del pueblo debió
lanzarse contra ellos, culpándolos de la escasez de alimentos y otros
bienes necesarios para la vida.
Uno de los síntomas de la decadencia maya en el período Clásico es la
ausencia de monumentos conmemorativos (las llamadas estelas)
posteriores al año 889 dC, celebrada sólo en algunos sitios de la
región.
Durante los siguientes siglos, no volvería a emplearse la Cuenta Larga
en las inscripciones calendáricas mesoamericanas, lo que pone de
relieve la conclusión de una tradición cultural.
Además de la Cuenta Larga (ese sistema de cuenta del tiempo que tanto
ha sorprendido por su exactitud y abstracción), lo único que
abandonaron los mayas del período clásico fueron las grandes ciudades.