En un perdido poblado al norte de
China, considerada como la cuna de la civilización de ese país, los
arqueólogos dan luz a los vestigios de una antigua cultura que ya
alcanza los 3.000 años de edad.
GARA | YANGSHE
El cementerio de Yangshe, situado a cien kilómetros del Río
Amarillo, entrega sus secretos sobre el Estado de Jin y su diversidad
notable y cultural en lo que es hoy la provincia de Shanxi. En otro
lugar, estos tesoros desencadenarían la pasión del mundo universitario.
En cambio, en China, una de las civilizaciones más antiguas del mundo,
son sólo uno entre tantos otros, de los que muchos tardan en ser
descubiertos. «Estamos en la edad de oro de la arqueología en China
desde finales de los años 80», dice Ji Kunzhang, experto del Instituto
arqueológico de Shanxi, un lugar repleto de excavaciones de Yangshe. Es
verdad que los descubrimientos se suceden y que a menudo son preciosos.
En Anhui, cientos de objetos de jade han sido exhumados, de entre
los cuales se encontraría el primer cochino esculpido en el país, un
objeto de 88 kilogramos que remonta al neolítico. En 2007, fueron más
de 10.000 piezas de porcelana y otras antigüedades las que fueron
recuperadas, setecientos años después de que se hundieran cerca de las
islas Xisha, en un buque que seguía la «vía marítima de la seda»,
llevando su carga al sudeste asiático y más allá. El cementerio de
Yangshe contiene 48 carretillas y los restos de 105 caballos,
enterrados con un antiguo dirigente del Estado Jin, que se había hecho
ilustre en sus campañas militares, durante la dinastía de Zhou del
oeste (1120-781 a.C).
Caballos y carretillas
Ciertas carretillas de Yangshe están conformadas por unos enganches
de ceremonia lacados de rojo, con ciertas piezas (cuartos) de bronce,
como las bisagras de las puertas. Otras, manifiestamente destinadas a
la guerra, están equipadas con placas de protección, también de bronce.
«Pensamos que se trata de unas carretillas y caballos que la caballería
utilizaba en sus campos militares», explica Ji Kunzhang. «Contamos por
lo menos 105 caballos. Pensamos que fueron drogados y enterrados vivos,
porque algunos tenían la cabeza erguida y, otros, las piernas atadas»,
dijo.
El cementerio fue descubierto en 1992, pero los medios económicos
necesarios para llevar a cabo excavaciones a gran escala no fueron
reunidos hasta 1996. Desde entonces, 19 tumbas han sido recuperadas e
hicieron falta cuatro años para terminar los trabajos de investigación.
Según declaró el propio Kunzhang, el museo que abarque estos
descubrimientos debería estar listo para ser abierto en el año 2010.
MUSEO
El museo ha recibido una inversión de 11 millones de euros y acogerá
las carretillas y jades rescatados de 19 tumbas pertenecientes a
dirigentes Jin y sus esposas.
http://www.gara.net/paperezkoa/20090203/119896/es/La-
arqueologia-china-viaje-dirigido-entranas-una-cultura-milenaria/