«Hay que integrar los grupos que hacen investigación arqueológica en las obras»
ALONSO RODRÍGUEZ DÍAZ CATEDRÁTICO DE PREHISTORIA DE LA UEX
«Hay que integrar los grupos que hacen investigación arqueológica en las obras»
-Sería deseable en un futuro, y en eso estamos trabajando tanto desde la dirección general (de Patrimonio) como desde la propia Universidad, en que haya una mayor implicación de grupos de investigación como el que represento en este tipo de tareas -dice el profesor Rodríguez Díaz-. Estamos implicándonos en ciertos yacimientos arqueológicos que entran de lleno en problemas históricos objeto de atención de otros marcos investigadores más amplios. En ese modelo integrado es en el que hay que seguir profundizando.
-¿Es que son empresas privadas las que están haciendo esa investigación urgente en las obras? ¿Es esa la única posibilidad?
-Es una de las opciones, que es la que está más generalizada tanto en Extremadura como en el resto del país. Pero habría que ir afinando ese modelo y propiciando no sólo que haya una tarea de documentación exclusiva desde el punto de vista administrativo sino también una integración de esos grupos investigadores que se ocupan desde otras perspectivas de los problemas que salen con estas obras de infraestructura. Ahora, trabajamos conjuntamente con el Servicio de Arqueología de la Junta de Extremadura en las obras del AVE y estamos llevando a cabo un plan piloto en el que algunos de los yacimientos afectados están siendo tutelados y analizados desde un principio por nuestro equipo de trabajo.
-¿Cuánta gente de la Universidad trabaja en esto?
-¿Esperan encontrar algo importante?
-Todavía estamos en una fase preliminar pero hay yacimientos que desde luego abren expectativas importantes en ciertas épocas que son de nuestro interés.
-¿Puede señalar alguno?
-De momento todavía estamos en una fase muy preliminar de valoración.
-¿Cómo están los estudios de arqueología en Extremadura? ¿Cuántos estudiantes salen al cabo del año?
-¿Cuántos estudiantes se matriculan?, ya que supongo que todos terminan los estudios pues esta es una actividad más bien vocacional.
-El componente vocacional debe ser inherente a todas las profesiones, no sólo del arqueólogo, sino de todos los que desarrollan su vida de trabajo. Ahora mismo en la Uex, en la Facultad de Filosofía y Letras, hay una tasa de matrícula inicial en Historia en general que ronda la cincuentena de personas, según el último dato que recuerdo. En Arqueología hay un porcentaje alto de gente, no sabría decir cual. Mayoritariamente son las dos áreas que acaparan la atención de los estudiantes desde el principio hasta el final, desde el ámbito de la investigación prehistórica-arqueológica y el de la historia del tiempo presente.
-¿Les afecta en algo la coyuntura de Bolonia?
-Nos afecta a todos, claro, en el sentido en que va a suponer una redefinición del modelo docente y en parte del modelo de aprendizaje que, como es sabido, forma parte de las políticas de convergencia que yo no voy a descubrir.
-Estamos en crisis. ¿Cómo vendería usted a un gobernante que hay que invertir en el sector de la investigación arqueológica, que no ha sido de los más favorecidos históricamente con el dinero oficial?
-Las prioridades en época de crisis son las que son y deben ser las que están en la mente de todos. Renunciar a la investigación muchas veces resulta lo más fácil, pero probablemente no sea lo más rentable a largo plazo. Creo que hay que buscar el equilibrio en estos tiempos difíciles y, sobre todo, la imaginación.