PERU - Nuevos hallazgos arqueológicos
Pereira es una de las zonas más ricas a nivel arqueológico en el país y se encuentra entre las más destacadas en Suramérica. Y paradójicamente es también una de las más saqueadas.
A esta situación se añade que son pocas las constructoras que
cumplen con la licencia arqueológica que determina que cuando se
realicen excavaciones en nuevas construcciones esté presente un
arqueólogo para identificar hallazgos valiosos.
Una preocupación que
les asiste a los arqueólogos Alexander Franco Enciso y Carlos Alberto
Restrepo Restrepo, del Laboratorio de Arqueología ubicado en el Centro
Cultural Lucy Tejada es que ni las curadurías, ni Control Físico, ni
la Secretaría de Gobierno, lo exigen y a excepción de algunas -y entre
ellas se puede mencionar a Autopistas del Café-, son pocas las que
cumplen.
Por eso el llamado de parte de estos profesionales, que en
el Laboratorio de Arqueología trabajan con las uñas y hasta baldes
deben ubicar para proteger a los hallazgos de las goteras, se
encaminan a que las Secretarías de Planeación tanto de los Municipios
como del Departamento y las curadurías, ejecuten lo que la ley les
obliga en materia de salvaguarda, recuperación, y protección del
patrimonio arqueológico.
Pero aquí hay un rezago en la materia.
Nuevos hallazgos
Mediante
análisis radiocarbónicos realizados en Italia, el Laboratorio de
Arqueología del Instituto de Arqueología del Instituto de Cultura de
Pereira, fueron reportados dos nuevos hallazgos para el Área
Metropolitana.
El primero de ellos fue un campamento de
recolectores-cazadores fechado para 7.470 años antes del presente, el
cual se halló en la Ciudadela Villa Verde de Pereira.
En el sitio en mención se hallaron varios golpeadores y una azada.
Por
su parte en el sector de La Romelia y sobre la margen derecha de la
quebrada La Chillona, realizando las tareas arqueológicas concernientes
a la apertura de la vía para la construcción del proyecto vial
Autopistas del Café, fueron excavadas varias estructuras funerarias
correspondientes a entierros primarios, donde se depositaba el cuerpo,
y secundarios, donde se depositaban los huesos.
Según las
investigaciones en la construcción de la tumba se vio involucrada la
mano de obra de niños familiares del fallecido. Lo anterior se sustenta
en el hecho de que el pozo y la estructura fueron muy pequeños y no
hubo posibilidad de intervención de personas adultas.
http://www.latarde.com/local/per/7669-nuevos-
hallazgos-arqueologicos.html