MEXICO - Localizan restos óseos de animales a unos metros del gran monolito de Tlaltecuhtli - [terraeantiqvae]
Dos nuevos hallazgos prehispánicos en el predio de Las Ajaracas. Por falta de recursos, suspenden excavaciones para trasladar a la diosa de la Tierra
Alicia
Islas, arqueóloga adscrita al Programa de Arqueología Urbana del Museo
del Templo Mayor, durante el análisis de los restos óseos que se
presume corresponden a un coyote o lobo que tiene un cuchillo de
pedernal entre los colmillos; a la derecha, aparece una figurilla de
mármol, de 25 centímetros, dedicada Tláloc, dios mexica de la lluvia
Foto: Cortesía PAU/ INAH Dos
ofrendas integradas por restos óseos de animales, cuchillos de
pedernal, figurillas dedicadas a Tláloc y diversos materiales de mar
son los hallazgos más r ecientes en el predio Las Ajaracas,
descubiertos a unos metros del gran monolito de Tlaltecuhtli, frente al
Templo Mayor. A
poca distancia de la monumental pieza que representa a la deidad
bisexual de la Tierra, en la cosmogonía mexica, los especialistas del
Programa de Arqueología Urbana (PAU), al proseguir los trabajos de
excavación en esa área descubrieron ambas ofrendas y, según apuntan las
investigaciones, el predio donado por el gobierno capitalino al
Instituto Nacional de Antropología e Historia seguirá aportando
vestigios prehispánicos. El
arqueólogo José Alvaro Barrera indicó que las ofrendas pertenecen al
altar en el que fueron hallados hace unos meses el par de frisos
adosados al muro, uno de los cuales se dijo representaba al dios Tláloc
y el otro a una deidad asociada con la agricultura, localizadas en la
etapa constructiva IV que data del gobierno de Moctezuma I. El altar, explica Barrera, se cree que mide alrededor de 8 por 8 metros y su ubicación es frente a la edificación
del templo de Tláloc, y las ofrendas se hallaron en posteriores etapas. ''La
ofrenda descubierta apenas el 7 de diciembre, al norte de Tlaltecuhtli,
contiene cetros serpentiformes, una valva de conchas (espondylus
calcifer), bolas de copal y una figurilla a Tláloc de las denominadas
penate y probablemente elaborada en mármol y la otra figurilla de copal
es una deidad relacionada con la agricultura, recubierta de estuco y
quizá originalmente pigmentada." También
se localizaron un coral, especie gorgonia, en forma de red, así como
restos óseos de serpiente, peces, un centenar de pequeños caracoles y
cuchillos de pedernal. José
Alvaro Barrera añadió: ''Esta ofrenda no se encontró en una caja, pues
estaba colocada directamente en el relleno tal y como fue puesta en esa
época y suponemos que fue ubicada en lo que sería la esquina del altar". Nos
falta, prosiguió, excavar a más profundidad para ubicar la esquina de
ese altar cuadrangular y corrobar las medidas. ''Por regla general hay
ofrendas en las esquinas o al centro de los basamentos y por ello es
probable que existan más." Osamenta completa de un felino La
ofrenda descubierta al sur de Tlaltecuhtli, localizada el 21 de
noviembre, sorprende porque contiene restos óseos de un felino,
probablemente coyote (en edad juvenil), con un cuchillo de pedernal en
el hocico. La osamenta, prosigue el especialista, se halló completa. También
se encontraron restos de cinco serpientes enteras, un elemento
elaborado en concha de la especie pinctada mazatlánica, que al parecer
es un pectoral circular calado de 11 centímetros de diámetro y que se
conoce como anahuatl. Dicho
pectoral es un elemento que portaban los dioses guerreros y se dice que
era un atributo de los personajes estelares ligados a la acción bélica
y a la muerte gloriosa en sacrificio. Aunado a ello en la ofrenda
también se hallaron cetros en forma serpentiforme, cuchillos de
pedernal, bolas de copal, puntas de proyectil y una piedra verde. A
propósito del traslado y restauración de Tlaltecuhtli, además de las
excavaciones que deben hacerse debajo de ella, fueron suspendidas por
el momento, debido a que se agotaron los recursos otorgados por el
Gobierno del Distrito Federal. Las teorías, explicó Barrera, que se manejan sobre la existencia de las cenizas del rey Ahuizotl en una vasija
(anterior a Moctezuma II) se despejarán conforme se avance en las excavaciones, cuya fecha todavía no se determina. Tlaltecuhtli
y los frisos empotrados fueron dados a conocer el pasado 2 de octubre
en Las Ajaracas, durante los trabajos rescate urbano a cargo del PAU en
el Centro Histórico. Fuente: ANA MONICA RODRIGUEZ / La Jornada, México, 14 de diciembre de 2006 Enlace: http://www.jornada. unam.mx/2006/ 12/14/index. php?section= cultura&article=a05n1cul
Alicia
Islas, arqueóloga adscrita al Programa de Arqueología Urbana del Museo
del Templo Mayor, durante el análisis de los restos óseos que se
presume corresponden a un coyote o lobo que tiene un cuchillo de
pedernal entre los colmillos; a la derecha, aparece una figurilla de
mármol, de 25 centímetros, dedicada Tláloc, dios mexica de la lluvia
Foto: Cortesía PAU/ INAH
Tláloc, dios mexica de la lluvia Foto: Cortesía PAU/ INAH