PATRIMONI HISTORIC i ARTISTIC


‘Homo capelladensis’

noticies de C A T A L U N Y A - — Publicat per josep.m @ 11:22
 
El yacimiento del Abric Romaní, referente internacional sobre la vida neandertal, cumple 100 años de excavaciones
 
 
 
Aspecto de las excavaciones del Abric Romaní el pasado agosto. Foto: IPHES
 
Aspecto de las excavaciones del Abric Romaní el pasado agosto. Foto: IPHES
 
 
 
 
Los trabajos pioneros de Amador Romaní en 1909, hace exactamente un siglo. Foto: IPHES
Los trabajos pioneros de Amador Romaní en 1909, hace exactamente un siglo. Foto: IPHES


 
ANTONIO MADRIDEJOS
BARCELONA

Los neandertales del Paleolítico medio emplearon un paraje del actual municipio de Capellades, en la comarca del Anoia, como habitual campamento de descanso. Allí, junto a un valle encajonado, se guarecían de la lluvia, comían, encendían fuego, planificaban la ruta y dormían. A veces pasaban varios días, aunque no era lo habitual. Los robustos cazadores desaparecieron para siempre de la Cinglera del Capelló, que es el nombre del paraje, pero las huellas dejadas por aquella ocupación, que se prolongó durante 40.000 años, nunca se esfumaron por completo.
En agosto de 1909, el industrial papelero y erudito local Amador Romaní, arqueólogo autodidacto, informó de que allí, en la Cinglera del Capelló, bajo toneladas de sedimentos, había descubierto algo muy interesante. No iba errado. Romaní dejó plasmadas sus impresiones en una pequeña joya editada por primera vez en 1995, el cuaderno Atles de Prehistòria.
La fisonomía del valle ha cambiado por completo al cumplirse un siglo del descubrimiento. Decenas de paleontólogos han trabajado este verano en el yacimiento, bautizado como Abric Romaní en honor a su descubridor, buscando herramientas de piedra y madera, huesos de animales consumidos o cualquier otro resto que ayude a conocer el pasado neandertal. En Capellades se han conservado hasta trozos de madera carbonizada, restos inequívocos de hogueras.

Tecnología puntera

En el yacimiento se excava de forma más o menos ininterrumpida desde los tiempos de Amador Romaní, pero el ritmo profesional de la actualidad comenzó hace dos décadas. Ahora se trabaja con disciplina, moderna tecnología y rigor científico, a la manera de Atapuerca, bajo la batuta de Eudald Carbonell y otros investigadores del Institut Català de Paleoecología Humana i Evolució Social (IPHES). Se filtra todo buscando pequeñas lascas de sílex e incluso las falanges de los roedores.
La aparición de incontables piezas vinculadas a la cultura neandertal ha convertido el yacimiento en un referente internacional. Es difícil encontrar en algún otro lugar una sucesión de estratos tan completa, 20 metros de profundidad, desde la época romana hasta 90.000 años de antigüedad, y un área potencial de trabajo tan amplia. Este año, por ejemplo, se han encontrado restos de una decena de nuevas hogueras, así como valiosos huesos de ciervos, caballos y bóvidos, algunos con restos de haber sido apurados con los dientes.
Los esfuerzos actuales se concentran en unos 200 metros cuadrados, pero el yacimiento tiende a crecer hacia el norte. ¿Cuántos años quedan por delante? «Muchos –comenta con seguridad Carbonell–. Esto es mucho más grande de lo que pensábamos. No vemos dónde acabará». Por ahora no han aparecido huesos humanos, es cierto, «pero quién entierra a los suyos al lado del hogar y el comedor», insiste el jefe de las excavaciones. Ello no le resta valor.
El yacimiento tiene muchas singularidades, pero posiblemente la principal es la conservación de las numerosas piezas de madera y los hogares de fuego, rarísimos en el registro fósil mundial. El milagro lo obró la rápida sedimentación, la acumulación de tierra y rocas caídos sobre los restos. El abrigó se colapsó definitivamente hace 35.000 años, prosigue Carbonell.

El futuro museo

El Abric Romaní celebra su centenario con la inauguración en octubre de un recorrido didáctico, explica Raül Bartrolí, técnico de patrimonio del Ayuntamiento de Capellades. Aunque llega con un retraso evidente, Bartrolí está convencido de que la espera habrá valido la pena: se trata de un itinerario de 1,1 kilómetros que permitirá contemplar en directo el estado de las excavaciones y estará acompañado de paneles explicativos. Habrá también talleres que enseñarán a fabricar herramientas de sílex y a tirar con un arco a la (supuesta) manera neandertal. La visita durará hora y media. En los días 6 y 9 de octubre se celebrará también un congreso internacional en Tarragona y Capellades .
Más adelante, pero no antes de tres años, la visita se complementará con un ambicioso museo, que será el primero de Catalunya dedicado en exclusiva a los neandertales, así como un centro de investigación, un jardín y un edificio de recepción-tienda. Todo ello formará parte de una visita completa. «Estamos en conversaciones con Madrid porque es un proyecto que les interesa mucho», concluye Bartrolí. Pero, claro, se necesitan al menos seis millones de euros.

 

 

 

http://www.elperiodico.com/default.asp?idpublicacio_PK=46&idioma

=CAS&idnoticia_PK=642947&idseccio_PK=1477



TORTOSA - La localización de un edificio sumergido confirma la relevancia de la Tortosa romana

noticies de C A T A L U N Y A - — Publicat per josep.m @ 11:16

 

 

 

Inesperados. Restos hallados en el barrio del Castell de Tortosa. Foto: JOAN REVILLAS

 Inesperados. Restos hallados en el barrio del Castell de Tortosa. Foto: JOAN REVILLAS



 

ANNA LLUÍS
TORTOSA

Sepultudas bajo la calle de Sant Blai. Necrópolis bajo la plaza de Els Estudis. La mayoría de excavaciones que han localizado restos de Dertusa, la Tortosa romana, han revelado solo indicios de la ciudad de los muertos, porque la que existió para los vivos sigue siendo un misterio que trae de cabeza a los arqueólogos. Tan solo el fragmento de alguna pared, monedas y, eso sí, un espectacular conjunto de lápidas han querido mostrarse a la modernidad para, además, confirmar en sus inscripciones la gran importancia que esa urbe romana debió de tener en la época de expansión del imperio.
«Dertusa era, sin duda, una gran ciudad, especialmente importante como enclave portuario por su ubicación en el río Ebro, que a su vez era la principal vía de circulación de productos hacia y desde la península Ibérica por el Mediterráneo», explica el arqueólogo y profesor de la Universitat Rovira i Virgili Jordi Diloli.
«Disponemos de documentación, datos, escritos de autores clásicos y objetos arqueológicos que dan cuenta de esa ciudad, pero no hemos dado con ella», lamenta el responsable del equipo de excavación que ha encabezado 14 intervenciones desde el 2005. La maldición de los romanos para los arqueólogos se evidencia en que, en cuanto se acercan a lo que podría quedar de la gran Dertusa, aparecen el agua y los lodos. «A la que bajamos a cierta profundidad, sobre los seis metros, topamos con la capa freática que yace bajo la ciudad, lo que dificulta enormemente los trabajos para acceder a los restos antiguos», señala Diloli.
La suerte de los arqueólogos ha topado las últimas semanas con una revelación inesperada. Los trabajos que efectúan en la calle de Sant Felip Neri, en el barrio del Castell, han dejado al descubierto los restos del edificio romano más importante de los hallados hasta ahora. Espectacular, aseguran los arqueólogos.
Se trata de una pared de 7 metros de longitud –que puede prolongarse hasta unos 15 metros–, muros transversales, estucos blancos, restos de depósitos hidráulicos, una pendiente de lo que podría ser un horno, dos sepulturas que indican que se encontraba extramuros, dos ánforas y un pequeño stri-
gilum
que da alguna pista sobre el tipo de edificio que han encontrado. Los especialistas se inclinan a pensar que han localizado una construcción de uso industrial, quizás para la salazón de pescado. El strigilum podía servir para raspar las escamas de sabogas y esturiones atrapados en el Ebro.
Secretos inabarcables
Los secretos parecen aún inabarcables. ¿Dónde estaba el puerto fluvial desde el que los barcos iban a Zaragoza y el interior peninsular o regresaban cargados de productos para el comercio? Al ser una gran ciudad, debería de haber necesariamente un foro, y templos para el culto, y unas termas, quizá algún teatro... ¿Dónde están? Tan solo ha salido a la luz un fragmento de muralla, pero tan corto que ni siquiera da para imaginar hacia dónde se dirigía su trazado.

 

 

http://www.elperiodico.com/default.asp?idpublicacio_PK=46&idioma=

CAS&idnoticia_PK=642844&idseccio_PK=1051



Ecuador - Hallan piezas de la cultura Panzaleo,

noticies del mon - — Publicat per josep.m @ 11:14


Las cerámicas encontradas en el sector Rumipamba de las Rosas, en Salcedo, tienen más de 500 años de antigüedad y pertenecen a la cultura Panzaleo.
Estas son algunas de las conclusiones de un informe que en los próximos días presentarán los técnicos del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) al Municipio de Salcedo.
En este cantón de la provincia de Cotopaxi, los trabajadores que construyen un colector de aguas servidas encontraron, hace tres semanas, dos pequeños objetos de tonalidades ocres.
Wilmo Gualpa, director del Departamento de Desarrollo Humano del Cabildo, explica que se pidió al Instituto que envíe técnicos para que inspeccionen el lugar. Además, se suspendieron provisionalmente los trabajos en el sector.
El funcionario de la regional Sierra Centro del Instituto, Édison Mena, y el arqueólogo Fernando Mejía recorrieron la zona. "A más de las vasijas se hallaron fragmentos de otras piezas y huesos de animales y de humanos", informa Mena.
Añade que es necesario realizar una excavación para precisar si en Rumipamba había un asentamiento o un cementerio.
El Municipio asignará, el próximo año, USD 15 000 para financiar la investigación. Junto a la zona del hallazgo se encuentra el Parque del Niño y la Familia.
Gualpa reconoció que ese trabaja no se puede iniciar con rapidez, porque el Cabildo no tiene presupuesto disponible para ese fin. "Para el próximo año, la meta es preservar los sitios arqueológicos que hay en el cantón".
Según el funcionario, a más de Rumipamba, en los últimos años se han registrado hallazgos en Tigualó, Panzaleo y Papaurco. Estos lugares fueron los más afectados durante las erupciones del volcán Cotopaxi. El último proceso eruptivo se registró en 1877.
El Instituto también organizará charlas para los funcionarios de los municipios de Cotopaxi, Chimborazo, Tungurahua y Bolívar. El propósito es solicitar que se realice un estudio arqueológico, antes de iniciar las obras para cambiar la red de agua potable y alcantarillado en la ciudad.
La entidad autorizó que se reanuden los trabajos en Rumipamba de las Rosas. Las cerámicas se exhiben en vitrinas, en las oficinas del Departamento de Desarrollo Humano del Cabildo.
Xavier Montenegro dirigía la construcción del colector de aguas servidas, cuando se encontraron las piezas arqueológicas.
Según él, los vestigios se hallaron a 4 m de profundidad, teniendo como relación el nivel de la calle principal. "En ese instante ordené que se pare la excavación. Encontramos 320 pedazos de barro y dos piezas enteras".

El Comercio
 
 
 
 
 
http://antiguaymedieval.blogspot.com/search/label/Sudam%C3%A9rica

LA CANONJA - Nova campanya arqueològica a la Boella

noticies de C A T A L U N Y A - — Publicat per josep.m @ 10:20

 

Un equip dirigit per, l'IPHES, intentarà documentar la riquesa fòssil en els diferents registres prehistòrics

 


Els arqueòlegs reprenen ara les campanyes arqueològiques
anteriors en el ric jaciment del barranc de la Boella. Foto: EL PUNT.

Un equip integrat per una quinzena de persones, dirigides per l'IPHES (Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social), participa des d'ahir en la segona campanya d'excavació al barranc de la Boella, a la Canonja. En la nova intervenció, que es portarà a terme fins al 26 de setembre, els arqueòlegs continuaran treballant a la zona coneguda com la Mina, una capa de més antiguitat que l'explorada fa dos anys en una intervenció d'urgència, i en què es van localitzar les defenses de mamut (Mammuthus meridionalis), a més d'un conjunt abundant de peces de sílex i esquist tallades per homínids.

«La manca de protecció del jaciment de la Boella, que es veu sovint afectat tant pel fet d'estar en un zona inundable com per l'activitat dels furtius, aconsella obrir pocs metres i aplicar el format de sondeig, que permetrà disposar d'una mostra sobre la riquesa específica dels nivells fossilífers i afinar el registre estratigràfic.» Així ho explicava Josep Vallverdú, responsable de l'excavació i investigador de l'IPHES (Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social), que ahir va començar una nova campanya en aquest ric jaciment de la Canonja.

El treball se centrarà en la zona de la Mina i també en l'àrea coneguda com el Forn. A la Mina, els dipòsits tenen una edat mínima de 800.000 anys. Els arqueòlegs continuaran treballant en el sondeig fet l'any passat, en què es van localitzar nombroses restés lítiques i faunístiques. Segons els responsables de l'IPHES, es tracta d'una superfície de 9 metres quadrats vora la llera inundable del barranc, «que pot ser un arxiu de molta resolució sobre la paleoecologia humana més remota del Camp de Tarragona», com va assenyalar Josep Vallverdú.

Pel que fa al jaciment del Forn, preveuen excavar una superfície d'extensió reduïda, d'entre 4 i 9 metres quadrats. «Es tracta de documentar el registre arqueopaleontològic que es correspon lateralment, a l'altre costat del barranc, al recuperat en el sondeig anomenat del Centre de Convencions, en què en una intervenció d'urgència fa dos anys es van posar al descobert diverses restes de mamut amb una antiguitat superior als 700.000 anys», va assenyalar Vallverdú.

Amb tot, el mateix investigador precisava: «L'edat d'aquest dipòsit és encara incerta, tot i que la biostratigrafia assenyala una edat mínima del plistocè mitjà inicial (sobre els 780.000 anys)». El conjunt fòssil es troba en diferents capes que ja es van explorar l'any passat en un petit sondeig en què es van recuperar restes d'ossos d'hipopòtam, entre altres restes faunístiques.

Malmesa per furtius

Però els responsables de l'excavació lamenten que «aquesta zona ha estat malmesa per furtius, que han provocat la destrucció de les restes arqueopaleontològiques del jaciment», segons el director de la intervenció, que precisa que en la nova campanya «es preveu excavar tota la successió estratigràfica».

La intervenció al barranc de la Boella disposa de l'ajut de l'Ajuntament de la Canonja. Els treballs de camp es duen a terme gràcies a membres de IPHES, de l'àrea de prehistòria de la Universitat Rovira i Virgili i del Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid (MNCN), a més de persones que hi treballen de manera voluntària.

Darrera actualització ( Dimarts, 8 de setembre del 2009 02:00 )

 

http://www.elpunt.cat/noticia/article/5-cultura/19-cultura/78454-

nova-campanya-arqueologica-a-la-boella.html


Powered by LifeType