Un punt de vista

24 Abr, 2013


HOMENAJE A JUANJO EN LUANCO

Amigos — Escrito por ebm @ 20:29

Hola Juanjo. Hola mi Capitán.

Te escribo esta pequeña nota o crónica en señal de agradecimiento y por haber tenido el honor de participar en la fiesta de tu 70 aniversario. Bien, 70 ó según dijo el cura, tu 80 aniversario. No vendrá de 10, pero menudo aniversario…

Ha sido algo espectacular. Me ha encantado el pasar cuatro días en tu Luanco natal, rodeado de tanta buena gente. De muy buena gente. Y con un programa a prueba de los más preparados: Hartón de comer, y beber, Dios mío !!

Para mí ha sido toda una aventura ya desde el sábado, cuando monté por segunda vez en mi vida a un avión. Y que aventura… Salía de una cena con mis compañeros de clase el último día de curso, y sin apenas dormir me embarqué en un avión para pasarme tres noches más de fiesta y poco dormir.

Ojeroso y con las piernas temblorosas aterricé en tu Asturias, donde ya me esperaba tu sobrino Marcos. Ni tiempo de tomar tierra y ya estaba viajando dirección al 8 Villas. No a Luanco, ni a Cabo Peñas, ni a Navas… Directo al meeting point. A qué m?? Pues a tomar un vino. !!!!

Después de un abrazo emotivo a Ángela, (que ya estaba blanqueando), directos al prado, en la ensenada de Moniello, a comer una fenomenal Fabada. Regada con Sidra. Y con vino. Y con más sidra.... Muy bien todo en aquel restaurante, regentado por una pareja, (septuagenarios diría yo), que no se cortan un pelo a la hora de liar una bronca doméstica delante los comensales cada 10 minutos. Todo un espectáculo, jeje. Y, eso sí, tienen un 5J y una cecina espectacular. Y no hablo de la sidra…

Saliendo de comer,  a todo correr para veros llegar en el bus. Dónde ?? Pues al 8 Villas... Dónde podía ser si no… 60 mojitos preparados a tu llegada, con una  pareja de gaitero i tamborilero tocando el Asturias patria querida. Y un montón de amigos tuyos rodeándote…

Debo confesar que de toda la multitud, solamente conocía a tu hija, a las pepas y a Ángela. Pero poco tardaron en presentarse todos y a aceptarme como a uno más, como si fuésemos amigos de toooda una vida…

Con la comida en la garganta todavía ya estábamos sentándonos de nuevo en una mesa larguísima, para pasar las siguientes cuatro horas comiendo, bebiendo y cantando. Mucho comer, mucho beber y muuuuucho cantar, con las tres guitarras  improvisando sin cesar. Que ambientazo, madre mía !! No estoy habituado…

Me lo pasé en grande con Mark No Fler, alias Pachucho creo. Una persona con la que me reí muchísimo y un guitarrista rebelde donde los haya. Un tipo elegante y con un punto de de humor muy especial. Aprovecho para mandarle un cordial saludo desde aquí.

No sabría decir la hora que nos “sacaron”  del restaurante primero, y del 8 Villas más tarde. Hubo un momento en que me pareció que el vaso se me hubiese pegado a la mano. Incluso llegué a pensar que era la mutación de una de mis extremidades. Una noche muuuy especial, de las que recordaré siempre por algunos aspectos muy emotivos y entrañables para mí.

Al día siguiente, me salté la visita al Museo ya que lo hice este mes de enero, de forma muy exhaustiva. Aproveché para dar una vueltina por las maravillosas calles de primera línea de mar, que me apasionan de manera especial: Casas bajitas, de múltiples colores y tonalidades, con tribunas, con  madera, el aroma de la mar, calles anchas, la visión del mar que nunca para en el mismo sitio, ora marea alta, ora marea baja, ora en medio… Me harté de plasmar estos momentos en fotografías.

Y me acerqué a la iglesia. Y me comí una misa que empezó a las 11:30. Yo creía que estabais allí aunque el programa especificaba que la misa era a las 12:00. Pero terminada ésta,  a las 12;15 y no viendo a nadie de la noche anterior, algo pareciome que fallaba. Y una llamada de Ángela me lo confirmó: La misa es a las 12:30 !!!  Ángela, fenómeno, también podías haber llamado antes...

Decir que a las 12:30 volví a escuchar la misa que te dedicaron, donde no quedó muy clara la edad que tienes…

Salir de misa y aterrizar en el restaurante La Pradera fue todo uno. Y más "Culines" de sidra…  Algún vino... Más “culines”, algún vino…  

Ah! Tuve la ocasión de ver como los asturianos animaban a Alonso en la salida del GP. Como se le quiere  al piloto en esta su tierra…

En fin, más comer, y más beber, y cantar, y esta vez, baile incluido !!

No se si es que faltó gente o se descontaron, pero había calderada para el doble de comensales. Excelente, por cierto. Impecable guiso de pescado y marisco. Que sepas que la intentaré copiar por estas latitudes en las que habito yo y en las que también tenemos pescado.

Ya en la mesa, realmente me parecieron todos los homenajes entrañables, desde el que te brindó tu hija, o el de tu hijo al que se veía que estaba muy emocionado, hasta el audiovisual de “Producciones Ochoa”. Conmovedor y muy sensible de veras. Hasta Pachucho se fue afectado por la emoción.

Después del baile, y para no variar, directos al meeting point. Alguna que andaba con el orujo de Hierbas, algún otro que sostenía algún GinTónic, Cervecitas,… Cualquiera que lea esto pensará lo que quizás no sea, pero yo lo percibí así. Comer,  beber y pasarlo bien, en muy buena compañía. Y es que no estoy acostumbrado a estas macro fiestas…

Por la noche no cené nada, solamente estuve paseando por estas calles que tanto me llaman y absorben. Buscando la foto perfecta… Foto que no conseguí, por cierto. Y a dormir después de manuscribir un poco los pensamientos del día.

El lunes se preparaba muy interesante, con una visita guiada por Gijón.

Bus a las 9h y, a la entrada de la capital del Concejo, recogida de la guía. Una sra canaria que me dejó asombrado por la capacidad de hablar y hablar y hablar… Visita a la Campa Torres, con una extensa exposición y examen incluído, sobre los Cilúrnigos que habitaron el cerro. Las vistas impresionantes de verdad: a levante, el enorme puerto del Musel y la ciudad de fondo. A poniente, el golfo en el cual se puede distinguir, a lo lejos, nuestro Luanco y el cabo Peñas, o Navas, e incluso las chimeneas de la central eléctrica que abastece de electricidad a toda la industria siderometalúrgica. Pero me quedo con la imagen, sublime para mi gusto, de  Navas y sus casitas de colorines rodeados de praderas verdes.

También resultó sorprendente la visita a la Universidad Laboral. Una construcción espectacular, y con una historia para tener en cuenta, de la época en que la dictadura era el sistema gubernamental en España. Un espacio con cierta similitud o parecido con El Escorial, pero el doble en tamaño y superficie, con una arquitectura y volumetría increíble. De hecho, está considerado el edificio más grande de España, con una superficie de 270.000 m2. Buen arquitecto el señor Luis Moya.

Terminada la visita de esta maravillosa construcción, directos a Cimadevilla, la zona antígua de Gijón, fundada por los romanos cuando abandonaron Campa Torres. Los vistas sobre el puerto deportivo hacen que esta zona de la ciudad sea de obligada visita. Me encantó, aunque la guía no nos dejó beber nada hasta que no llegamos al restaurante Tierra Astur, ( debía tener comisión, jejeje). Tooooda la mañana sin poder beber nada, con lo cual al llegar, y sin querer, me bebí media jarrita de Sidra. Yo creo que igual hicieron todos.

El restaurante en cuestión está pegando a la playa, en uno de los tres edificios que asemejan la popa de tres enormes buques, todos diferentes. Muy curioso y nunca visto hasta ahora al menos por mí.

El interior del restaurante también es digno de visita, porqué se divide en enormes barricas horizontales con espacio para 8 personas en cada una de ellas.

Después de comer, fui a buscar un encargo que me hicieron. Concretamente unas casadielles de una panadería en especial. Me alegró mucho tanto encontrar la tienda así como que hubiesen casadielles para poder comprar. No siempre tienen… Un paseíto más por la calle Corrida y de vuelta al autobús, dirección a Luanco de nuevo. Un día agotador, cierto. Pero muy interesante.

Por la noche, la verdad es que no tenía hambre alguna, pero Lady Albariño me lió de nuevo a tomar un vinito… Y un segundo … Y …

En fin, que la aventura tocaba a su término porqué a la mañana siguiente debíamos partir hacia casa. Yo tenía posibilidad de avión o de Bus. Por la noche decidí que valía la pena apurar y volver en avión, ya que el bus salía a las 8 de la mañana y el avión me daba de margen hasta las 15 horas.

Paseo a primera hora, apurando vistas, absorbiendo imágenes, aromas, sensaciones, fresco, … Despedida emotiva a pies del Bus de todos los que volvían en el, y a desayunar al 8 Villas. Pintxo y café con hielo, con lectura del periódico del día para ir ambientándome.

Repetí café pasadas las 9 con Ángela, como despedida. Ella no me ha dejado ni un momento, gracias a lo cual no me sentí extraño en ningún momento. Gracias Ángela por ello.

Decidí ir a dar un último paseíto por el muelle y la playa de pasada la iglesia y me despedí de Marcos también. Ya no me alcanzó a decir adiós a Pachucho, cosa que me dolió.

Una emotiva despedida de la prima de mi gran amigo Juanan, que casualmente trabaja en el hotel donde me alojé. Prometí cuidar de su primo ya que yo lo tengo mucho más cerca que ella. Puedes estar segura que lo hago y lo haré, dado que es un muy buen amigo.

Y ya sobre las 11 cogí el bus hasta Avilés, donde me permití dar una vueltecita para conocer un poco la ciudad. Tengo que volver con más tiempo, porqué es una ciudad que merece investigarse más. Lo que sigue ya no tiene mérito alguno, salvo que llegué a Barcelona , en cuatro minutos cogí el tren hasta Sants, en 4 minutos más cogí el tren de Sants hasta Tarragona cuyo trayecto me tocó permanecer de pie por la ausencia de asientos libres. Justo llegar a casa, incluso me dio tiempo de ir al médico a que me retiraran la escayola que me ha acompañado durante 5 semanas largas. Llegué con media hora de antelación.

Pensaba, mientras esperaba a que me llamaran en la consulta, que hacía cuatro horas estaba en Asturias, y en apenas tres horas, había llegado a Tarragona pasando por Barcelona previamente. Lo que hacemos los mecánicos, madre mía…

Y todavía me dio tiempo de ver a personas a las que quiero, como por ejemplo Li o Glam.

Por la noche, ya en mi cama habitual,  recordaba unas palabras que me dijeron: “todavía no te has ido y ya se te echa de menos”. La verdad es que yo también echaré de menos a Luanco y a sus gentes, a las pocas que conozco.

Bueno, y ahora que he terminado este concentrado de cosas, hechos, vivencias, experiencias,  viene  la parte de análisis:

Capi, he asistido a una fiesta de cumpleaños, preparada por tu familia.

A la Sra Pilar, a Pilar la hija y a Juanjo el hijo, debo decir que sois acojonantes como personas por haber preparado algo tan grande para vuestro Juanjo, esposo y padre por la parte que os toque a cada uno.

Me habéis impresionado muy mucho por el cuidado de todos los detalles de la fiesta con el propósito de darle una sorpresa, que vive Dios que se la llevó.

Habéis conseguido juntar una gran cantidad de amigos de toda la vida de Juanjo, en Luanco, su tierra natal. Habéis comido, bebido y cantado, Le habéis homenajeado…

Sinceramente, me siento alagado de que me hayáis hecho partícipe de semejante evento, el cual recordaré por vida.

Juanjo, eres un tipo muy afortunado por tener esta familia y estos amigos. Debes haber estado sembrando mucho en  estos 70 u 80 años de vida para recoger tanto y en tanta cantidad.

Te tendré como un ejemplo a seguir, sin duda alguna.

 

Por muchos años que pueda contar con tu amistad y que pueda yo considerarme amigo tuyo.

 

PD: Guardaré con cariño el cancionero que editasteis para este evento.

PD de PD: Muchas gracias a Luanco por acogerme. Me siento feliz en esta tierra que habitáis.

 

Comentarios

  1. Qué bonita narración del evento!! Fue un gusto tenerte con nosotros y que vinieras de tan lejos para acompañar al capi. Seguro que bordas la calderada, creo que en junio o julio Ángela y Marcos irán a examinarte al barco a ver qué tal te sale, así que a practicar... Nos vemos pronto en tu tierra, más bien en tu mar!

    Escrito por pilar8a — 03 May 2013, 07:20

  2. Me gusta

    Escrito por T.P — 27 Abr 2013, 06:56


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