COSAS DE LA VIDA

Mi amiga T. es arquitecta. Durante los años locos de la construcción, ella veia que su empresa engañaba a la gente. En los planos, la escala de los muebles era más pequeña, de forma que en un comedor enano, dibujaban tres sofás, mesa, mueble y mesita de café. La gente pensaba que realmente cabía todo eso. Otras veces, añadian instalaciones que no estaban en plano, y la habitación quedaba más pequeña. Hicieron habitaciones de matrimonio donde no cabía la cama, más pequeñas que la del plano.

Mi amiga T., no podía consentir estas cosas, así que engañaba a los constructores. Ella hacía los muebles mucho más grandes, para tener que diseñar habitaciones más grandes, y sobredimensionaba las instalaciones.Era la defensora secreta de los compradores.

Una vez, su jefe le pidió hacer una estructura mala para una zona donde a veces hay pequeños terremotos. Algunos arquitectos han vendido su ética. T. sabía el riesgo que comportaba, así que boicoteó la obra para que no hicieran un edificio donde podía morir gente. Ocultó documentos y dijo a los inversores que esa obra no se iba a vender. Los promotores tardaron en encontrar dinero, los arquitectos se encontraron con sorpresas que retrasaron la obra, y gracias a dios, llegó la crisis del 2008. El solar no se ha construido. T. es una superheroina.

Desde luego, que despidan a la gente no es bueno, pero ahora se está dando el caso de que profesionales de 30-40 años que se quedan sin trabajo, se van a la administración pública. Es gente con experiencia en su campo y acostumbrada a la empresa privada. Esto se nota a la legua. No digo que todos los funcionarios que llevan 20 años sean malos, son diferentes. Cada uno tiene una visión diferente, así que ahora hay más diversidad, y eso enriquece el panorama. Los nuevos trabajadores públicos son más críticos, más cañeros y tienen más historias para contar.

Cien veces he vendido, repitiendo como un loro, que las crisis son buenos momentos para cambiar y mejorar, ahora me lo voy a empezar a creer.

Por cosas de la vida, una vez conocí una Colombiana que se dedica a entrenar a las chicas que trabajan de correo. Por supuesto, llevando coca. Normalmente les pillan porque la chica se pone nerviosa, empieza a sudar, se queda blanca y le tiemblan las piernas. Los guardia civiles ya saben lo que hay. La última era muy ingeniosa, viajaba con una perra supuestamente embarazada, pero dentro llevaba paquetes de coca. Cuando el guardia civil le dijo que era una perra muy bonita, que la sacara de la jaula, la chica contestó "no, me da miedo". Tu perro no te puede dar miedo, así que la pillaron.

La entrenadora les metia en el coco que hay que creerse la coartada, montarte tu historia y actuar como si fuera verdad. Repasar cada detalle. Una mentira siempre parece verdad si la dices seria, tranquila y con convicción.

Este método me parece muy útil en la vida, por ejemplo para las entrevistas de trabajo, para las mentiras de cada día.... por cierto, los hombres mienten más que las mujeres, 6 veces al día de media frente a 4 de las mujeres,