La
UNESCO expresó en su último informe, presentado el año pasado, la
posibilidad de desposeer
a la ciudadela de barro del título de
Patrimonio de la Humanidad.
Lima, 24 ene (EFE)
La ciudadela de barro de Chan Chan, la más grande
de este tipo en América y con más de 500 años de antigüedad,f ue
declarada en emergencia por las autoridades peruanas debido a la
invasión de pobladores y la amenaza de fuertes lluvias.
Se trata de una decisión tomada esta semana por el consejo regional de
La Libertad, departamento 400 kilómetros al norte de Lima, donde se
encuentra este monumento, y que busca solucionar los problemas de la
ciudadela y con ello solventar la amenaza de la UNESCO de retirarle el
título de Patrimonio de la Humanidad.
"No es solamente por las lluvias, la declaración de patrimonio depende
de las invasiones, del avance de los agricultores en las zonas
monumentales, y de que nadie se preocupa de que sean sacados de ese
lugar", afirmó hoy a Efe el director de la Unidad Ejecutora 110,
encargada de la conservación de Chan Chan, Cristóbal Campana.
Chan Chan, en las cercanías de la norteña ciudad de Trujillo, fue la
capital del reino Chimú, que logró su esplendor en el siglo XV, periodo
previo al Imperio Inca, albergando hasta 60,000 habitantes en un área
de 1,400 hectáreas, que comprendía plazas, viviendas, depósitos,
talleres, laberintos, murallas, caminos y templos.
En 1986, la ciudadela recibió el título de Patrimonio de la Humanidad
y, prácticamente desde entonces, fue declarada en peligro por la misma
UNESCO debido, según el Instituto Nacional de Cultura (INC) peruano, al
daño que el agua, viento y sol causa en el barro.
Este año, según Campana, "han llegado lluvias imprevistas, que se
esperaban en diciembre y lo han hecho en enero", lo que ha empeorado la
situación hasta dejar "muchos lugares al borde del colapso".
Sin embargo, para Campana, el principal problema no son las lluvias,
sino la recurrente invasión de pobladores en zonas protegidas, un
problema similar al que el pasado martes causó la muerte de dos
policías que participaban en el desalojo del Bosque de Pomac, también
en el norte peruano.
El escenario varía de una reserva natural a una histórica ciudadela de
barro, pero el motivo es el mismo, campesinos que ocupan un territorio
protegido y que luego rehusan desalojarlo.
"Una buena parte (de Chan Chan), sobre todo la del norte, es la que
está ocupada por campesinos que están construyendo y haciendo acequias,
abriendo sus chacras (tierras de cultivo), eso es lo que más hace
peligrar", alertó Campana.
La declaración de emergencia, que incluye una partida de 1,2 millones
de soles (300,000 dólares) servirá para paliar en parte este problema,
pero el de las invasiones parece más complicado.
"La atención para las invasiones está a cargo del INC, ellos son los
encargados", aseguró Campana, quien reconoce tener las manos atadas en
esa materia.
http://www.eldictamen.org/ver_nota.php?noticia=1375&
seccion=Ciencia%20y%20Tecnologia&year=2009