Malditos dípteros
06 Febrero, 2008 11:04
Escrito por jmdf,
General
por Josep Maria Dalmau jmdf@fondoimagenes.com www.fondoimagenes.com
Cuando la primavera empieza a perfumar los campos y las primeras flores dan un toque multicolor a la campiña, aparecen también las primeras nubes de mosquitos.
Invaden primero las primerizas charcas, atormentan a los animales y al hombre si se pone en su camino. Enseguida exclaman desesperados; malditos mosquitos. Estos disgustados por el recibimiento acaban por invadir también las casas de los humanos.
Empieza una guerra de mal decidir quien será el vencedor. El hombre usa todo su arsenal químico contra los dípteros causando grandes estragos en sus filas.
Puede que este tan contento al llegar la primavera, cuando los días se alargan y puedo aprovechar cualquier momento para ir al primer arbusto reverdecido a mirar si ya han llegado mis pequeños amigos, o puede simplemente que sea algo rustico y no comprenda nada.
El ruido de la ciudad insulta mis oídos, para que sirvan las orejas si no puedo escuchar el aletear de las abejas construyendo su nido, ni las discusiones de las recién transformadas ranas al borde de su charca.
¿Son fastidiosos?
Si, por que vamos a negarlo, pero pensemos que cuando Dios creo la primera luz, también creo la primera sombra. Si no tuviésemos la incomodidad de la picadura de algún pequeño insecto, como notaríamos el suave murmullo del viento refrescándose sobre el agua, de este viento purificado por la lluvia primaveral perfumado con el olor de mil hierbas aromáticas.
El fotógrafo de la naturaleza debe aprender a distinguir y conocer todas estas cosas, y cuando encontremos moscas y mosquitos sacaremos nuestra cámara y a por ellos, que de todo debe haber en el jardín del Señor y unos cuantos ejemplares de dípteros no puede faltar en nuestro archivo. ¿Que son los dípteros?Son los insectos cuyas alas posteriores se han convertido en halterios, es decir, solo tienen dos alas y no cuatro como el resto de los insectos.
Vistos así, están lejos de parecer amables y simpáticos. Muchos transmiten agentes patógenos, como por ejemplo el mosquito puede ser transmisor de la malaria.
La mosca tse-tse puede portar el patógeno de la enfermedad del sueño, también pueden contaminar los alimentos y producir muchas emferdedades intestinales.
Se alimentan principalmente de pulgones limpiando plantas y árboles de tan malignos habitantes, aunque en ocasiones también pueden alimentarse de materia vegetal putrefacta ayudando así a la regeneración de los bosques. Tienen predilección por las flores blancas o amarillas, las encontraremos especialmente cerca de la milenrama o las caléndulas.
Estas moscas, pueden incluso con la araña roja que constituye una de las más temidas plagas de los frutales.
Pero los agricultores con el uso indiscriminado de potentes insecticidas eliminan pulgones, ácaros, arañas rojas y también a sus benéficos depredadores naturales.
Mencionaremos solo de pasada a los tábanos, auténticos torturadores del ganado que pueden llegar a matarlo con sus picaduras. Vistos los pros y los contras de los dípteros, ha llegado el momento de fotografiarlos para incorporarlos a nuestro álbum.
Los mosquitos son muy pequeños, hay que usar un súper macro o bien tubos de extensión para llegar a cubrirlos. Las moscas tienen bastante más tamaño. En las horas templadas del día suelen posarse sobre una planta y estarse bastante rato.
No beber nunca de esta agua y si tenemos alguna herida no entremos en contacto directo con ellas, los lugares pueden ser bastante insalubres, pero es tan bonita una toma de un mosquito flotando sobre el agua que todo fotógrafo de la naturaleza digno se arriesgara para conseguirla.
No me cansare de recomendar ir convenientemente protegidos, cuanto mas tapados menos superficie para que nos piquen y un ultimo consejo, si el lugar escogido esta lleno de nubes de mosquitos, embadurnémonos manos y rostro con fango, al secarse, no hay mejor protección.
Ortópteros, grillos, saltamontes y langostas
15 Febrero, 2008 10:39
Escrito por jmdf,
General
per Josep Maria Dalmau jmdf@menta.net www.fondoimagenes.com
A pesar de la mala fama que las historias bíblicas le han atribuido, los simpáticos ortópteros no son tan malos como los pintan. Además son unos magníficos modelos que nos pueden ayudar a conseguir unas fotos fabulosas y con poco riesgo.
Saltamontes, grillos y langostas todos de una misma familia aunque se les conoce mas de 20.000 especies. Los podemos encontrar en todo el mundo con las variaciones propias de su lugar de origen.
Tienen dos fases que se diferencian por el color y las costumbres.
La fase migratoria (gregaria) y la fase sedentaria. Según el alimento del que disponen, hace que pasen de una fase a otra. En nuestras latitudes donde saltamontes y langostas están controlados y tienen comida suficiente nunca pasan de la fase sedentaria. Es en países tropicales donde un mal año con carencia de hierba habiéndose multiplicado en abundancia el año anterior pueden llegar a la fase migratoria (gregaria) por la falta de comida y llegar a convertirse en una plaga que lo arrasa todo a su paso.Tal como nos cuenta el relato bíblico, cubren todo el terreno dejando un manto negro allí donde se posan. Devoran toda la hierba y la fruta y cuando nuevamente emprenden el camino, el lugar es totalmente inhóspito.
¿Como son los saltamontes? Tienen una cabeza triangular de las que sobresalen unas antenas que emplean para orientarse y como órgano olfativo. Detectan de lejos los peligros que los acechan, encuentran la comida y saben su sabor.
Los órganos visuales de los saltamontes están constituidos por pequeñas retículas que les dan una magnifica información general.
Las alas traseras, les permiten volar; pero no pueden recorrer grandes distancias.Solo las langostas migratorias pueden efectuar largos vuelos ayudadas por los calidos vientos del desierto.Viven en cualquier parte, aunque prefieren sitios calidos. Nacen con la primavera y se reproducen durante el verano.
Su número y habitats están determinados por la cantidad de comida que encuentran. Esencialmente son herbívoros aunque también comen frutos.
Tienen el paladar muy fino y les gusta probar la comida antes de tomarla, para ello se valen de las antenas que usan a modo de papilas gustativas. Una vez es de su gusto, la trituran con sus poderosas mandíbulas. Los saltamontes en determinadas circunstancias son una amenaza para la agricultura, pero la naturaleza en su gran sabiduría los controla por medio de sus depredadores naturales como las mantis y algunos escarabajos que los devoran en gran cantidad.
Aun así, para el hombre no representan ningún peligro, el fotógrafo de la naturaleza puede estar tranquilo que ningún mal pueden hacerle. Salvo, eso si; la curiosa costumbre que tienen de saltar cuando nosotros pasamos con tan mala fortuna que en ocasiones nos aterrizan en plena cara. No pasa de ser una interesante anécdota que contar.
Son muy fáciles de fotografiar, entre salto y salto les gusta estar largo rato sobre una hoja o planta olisqueando su posible alimento. Si adoptamos las precauciones habituales largamente descritas en este libro, es decir; acercarnos muy, muy despacio procurando mover muy poco las hierbas a su alrededor, nos dejaran acercarnos tanto que les veremos los dientes masticando sus vegetales. Es una bonita experiencia que las modernas cámaras digitales con sus potentes ópticas en modo macro pueden ayudarnos a inmortalizar.
Garrapatas
21 Febrero, 2008 09:59
Escrito por jmdf,
General
por Josep Maria Dalmau jmdf@fondoimagenes.com www.fondoimagenes.com
Cuando el sol empieza a caldear las primeras flores y los campos y prados se llenan de color, ha llegado la tan esperada primavera. Todo reverdece y el fotógrafo de la naturaleza se libra de su torpor hibernal y acude a la llamada mágica de la natura. Los primeros insectos empiezan a eclosionar, el diente de león llena de amarillo los bordes de los áridos caminos y las primeras garrapatas dan saltos de alegría con la llegada de nuevos visitantes, pero. No todo es hermoso en la naturaleza.
Si a lo largo de este libro he intentado dar una imagen optimista de la natura y sus habitantes, esta es la excepción. Las malditas garrapatas no sirven para nada y al llegar la primavera se convierten en un problema tanto para el fotógrafo como para su inseparable mascota, “si la lleva.” Es muy habitual que para conseguir buenas imágenes tengamos que arrastrarnos por los matorrales o en ocasiones estar largos ratos parados a la espera que el pequeño insecto que estamos esperando se pose en el lugar adecuado.
Este es el momento elegido para que las nefastas garrapatas se ceben en nosotros. Pero; que son las garrapatas.Son pequeños artrópodos arácnidos que a diferencia de otros insectos su cuerpo solo tiene dos partes. Una pequeña cabeza y un enorme abdomen, no tienen mas allá de un par de milímetros. Se alimentan de la sangre de todo bicho viviente al cual se pueden agarrar (mamíferos, aves y reptiles) y como no podría ser de otro modo, también pican a las personas aunque sean honrados fotógrafos de la naturaleza.
Aunque su picadura solo nos produzca una pequeña hinchazón, es imprescindible extraerlas inmediatamente, pues pueden transmitirnos virus y bacterias capaces de causar muchas enfermedades.
La garrapata introduce la cabeza en la piel de sus victimas a fin de aposentarse y empezar a llenarse de sangre, por lo que para sacarlas hay que proceder con mucho cuidado con unas pinzas, cogerlas por el abdomen sin aplastarlas y tirar cuidadosamente a fin de que también salga la cabeza. Después; una buena friega de alcohol para desinfectar la pequeña herida. Quemar la garrapata con un cigarrillo, sale en las películas pero lo mas probable es que salgamos nosotros quemados; no es recomendable. Tampoco rociarlas con aceite da demasiado buen resultado. En el caso de un parásito que se haya instalado profundamente, puede ser necesario ir al medico para que la extraiga con una pequeña incisión.
Pero ya que los miserables ácaros llegan inevitablemente cada primavera igual que las hermosas flores, cojamos nuestras cámaras y ha fotografiarlos, que si Dios los ha puesto en el campo por algo será. Al menos sabremos como son de feos cuando los veamos ampliados. Para ello, lo mejor es una pequeña compacta de las que tienen un modo súper macro a un centímetro para poder acercarnos lo suficiente hasta que cubran el fotograma. Ya que tantas molestias nos han dado, saquemos buenas fotos.
La Mantis Religiosa.
25 Febrero, 2008 09:43
Escrito por jmdf,
General
por Josep Maria Dalmau jmdf@fondoimagenes.com www.fondoimagenes.com
Ya para acabar esta serie de capítulos orientados a fotografiar insectos; he querido empezar este libro con los seres mas pequeños de la creación pues no en vano son los mas desprotegidos. Todo el mundo se preocupa por los grandes cetáceos que están en peligro de extinción lo cual me parece muy bien, tiene su importancia, pero que haya especies de libélulas que han sobrevivido 300 millones de años y que en un siglo de industrialización estén desapareciendo, esto no parece preocupar demasiado a la opinión publica. Son muy pequeños, quien los va a encontrar a faltar.
Aclarados estos puntos vamos con unos pocos insectos menos conocidos para acabar estos capítulos. Uno hay de legendario rodeado de una fama enigmática y misteriosa. Me refiero a la Mantis Religiosa, también llamado santateresa. Es un insecto de la familia Mantidae que siempre ha habitado en el sur de Europa. En el siglo pasado llego al nuevo mundo a bordo de los barcos mercantes cargados de semillas y vegetales.
La hembra tiene un tamaño mayor al del macho, lo cual representa un problema para la seguridad especialmente para este pues después del apareamiento la mantis hembra esta muy irritable y agresiva. Cuando llega el momento de perpetuarse la mantis hembra emite feromonas para atraer al macho, es el único momento en que ambos sexos se unen, una vez fecundada la hembra sus veloces patas delanteras atrapan la cabeza del macho la cual es triturada en primer lugar antes de seguir con el resto. El macho, no solo es simiente, también es alimento para la madre de sus descendientes. La parte positiva, es que la copula es larga; puede llegar a durar dos horas con lo que el macho muere contento.
Existe la leyenda urbana que las mantis son peligrosas, esta inculta tradición ha hecho que sean perseguidas por los labriegos y casi exterminadas en lugar de protegerlas por su alto valor como controladoras de plagas. No son venenosas, utilizan sus fuertes patas delanteras solo para sujetar a sus presas y devorarlas empezando por la cabeza pues así se inmovilizan antes. Si actuamos como siempre he recomendado acercándonos al insecto muy lentamente y con sumo cuidado de no mover las plantas circundantes, la podemos coger con mucho amor y ponerla en la palma de nuestra mano. La armonía de nuestros movimientos es vital para acercarse a los pequeños insectos y evitar que nos ataquen.
Las mantis son muy rápidas en el ataque pero están largos ratos de placida observación, podemos usar estos momentos para acercarnos a ellas, buscar la toma optima y conseguir con poco esfuerzo una muy bella toma.
Cangrejos de rio.
29 Febrero, 2008 11:28
Escrito por jmdf,
General
por Josep Maria Dalmau jmdf@menta.net www.fondoimagenes.com
Después de un amplio repaso a los insectos y arácnidos, conociendo ya someramente sus principales características que nos permitirán fotografiarlos con una cierta comodidad, es el momento de tratar a otra clase de artrópodos. Los cangrejos de rió.
Cuando en un rió hay cangrejos, significa que el agua esta en buen estado y que el hombre y sus diabólicas creaciones “las industrias” todavía no lo han arruinado. Démosle tiempo, tal vez por esto me gusta tanto mi trabajo; las huertas y terrenos cultivables van desapareciendo en aras de la industrialización, los bosques que son nuestros pulmones son talados, los ríos autenticas venas de nuestro planeta son contaminados. Llegara un día que habrá que ir muy lejos para encontrar pequeñas muestras de la fauna y la flora. Espero no ver este día, pero por si acaso como notarios que somos de la naturaleza dejamos este testimonio grafico. Si no cuidamos la natura puede que llegue el día que solo queden estas imágenes para recordarla.
No hay mayor placer cuando ya entrada la primavera o en verano caminando por el lado de un rió de cristalinas aguas encontramos un remanso y sin pensarlo dos veces nos adentramos en su cauce. Los pequeños odonatas pronto se acostumbran a nuestra presencia y revoletean a nuestro alrededor, las ranas mas desconfiadas dan increíbles saltos conforme vamos avanzando muy lentamente; pero y bajo el agua, es el momento de empezar a inspeccionar que vida hay bajo la superficie.
La vida vegetal casi siempre esta presente, muchos insectos y anfibios empiezan allí su primera etapa de vida como en el caso de las ninfas de libélulas o los renacuajos; después una profunda metamorfosis los convertirá en habitantes terrestres. Pequeñas serpientes de rió habitan sus cauces, no preocuparse; las de nuestras latitudes son inofensivas. Si va a un rió de los trópicos y encuentra una anaconda, creo que es mejor huir tan rápido como pueda. Pero nuestras modestas víboras de agua solo pueden dar un sobresalto.
Dado que nos moveremos por dentro del agua con profundidades escasas de 20 o 30 centímetros, las reflex con una cámara estanca las descartamos por su peso y volumen. También su precio es elevado y mejor evitar pequeños accidentes que siempre los hay. Para estos menesteres acuáticos, mejor un equipo muy sencillo y suficiente, hay actualmente en el mercado pequeñas cámaras compactas resistentes a los golpes y estancas hasta los cinco metros, profundidad a la que nosotros nunca nos sumergiremos. Tienen normalmente un modo macro a partir de tres o cuatro centímetros que siempre nos puede hacer falta y un CCD de siete u ocho megas de resolución que da unos archivos editables a tamaño A3 o superior. Otra ventaja que tienen es su precio muy asequible. Dado que las cámaras del fotógrafo de la naturaleza no acostumbran a tener una vida muy larga pues mueren por accidente “las cámaras, no el fotógrafo” o bien son sustituidas por nuevos modelos que siempre ofrecen cosas nuevas, estas pequeñas cámaras ofrecen precios razonables y tamaño y peso muy llevaderos.
Como fotografiar bajo el agua.
Entendemos que ya nos hemos procurado una pequeña compacta sumergible y mejor a prueba de golpes, arremangamos los pantalones y nos adentramos en el rió. Aconsejable dejar fuera la bolsa con las otras cámaras que no se llevan bien con el agua, la documentación y otros enseres personales que acostumbramos a llevar a cuestas. Un bastón que yo siempre llevo en mis caminatas muy útil para apartar una ocasional serpiente que a veces en pleno verano encuentras durmiendo en medio del camino y pueden tener un mal despertar, servirá también para ir verificando la profundidad, no sea que mirando el fondo, nos encontremos con el agua a la cintura. Podemos procurarnos una caja con un cristal al fondo que nos dará una visión cristalina del medio acuático, pero ya añadimos cosas en nuestros paseos por el agua y mientras tomamos una foto la cajita se puede ir flotando rió abajo. Mi experiencia me aconseja adentrarnos en el rió con la cámara colgada al cuello, el sol a la espalda y el fondo se nos aparecerá con bastante claridad. Si avanzamos suavemente muy despacio descubriremos una rica fauna que vive bajo la superficie esperando que la fotografiemos.
