06 Marzo, 2008 10:37
Escrito por jmdf,
General
por Josep Maria Dalmau jmdf@menta.net www.fondoimagenes.com
Después de haber chapoteado en el rió para fotografiar cangrejos, es el momento de buscar algo mas atrevido para lo cual vamos a tener que usar toda nuestra artillería pesada. Hablamos de las huidizas y desconfiadas ranas. Las ranas, son anfibios de la familia de los anuros; existen desde hace millones de años y muy probablemente fuera el primer animal en salir del agua para convertirse en terrestre, su maravilloso sistema polivalente lo ha hecho perdurar a través de miles de milenios, solo el hombre moderno y el catastrófico uso que ha hecho de la tecnología que ha provocado el cambio climático esta a punto de hacerlas desaparecer.
Han sido parte importante en las creencias de muchas civilizaciones empezando por los primeros egipcios que la adoraron en forma de Herit, diosa con cabeza de rana protectora de las parturientas y muy probablemente a causa de sus maravillosos poderes de regeneración, cuentan que ayudo a Isis a recomponer los restos de Osiris para volverlo a la vida. Muy presente en la vida de los egipcios, Moisés las uso como bala de cañón en una de las plagas contra el Faraón. Para los occidentales, es un príncipe encantado que la princesa despierta con un beso; mas aconsejo precaución a las impúberes jovencitas que quieran hacerse con un príncipe azul besando ranas, por que estas tienen unos pigmentos en la piel bastante tóxicos; no sea que buscando a su príncipe terminen con una fuerte diarrea.
Mas estos mismos pigmentos que secretan a través de la piel, los científicos han descubierto que poseen unas propiedades químicas que una vez desarrolladas son muy útiles en la elaboración de medicamentos contra el cáncer y potentes analgésicos. La principal característica, son los péptido que eliminan las bacterias destruyendo su membrana celular. Ahora que los antibióticos son cada vez menos efectivos por la masificación que hacemos de ellos, esta seria una nueva medicina que nos ofrece la naturaleza. Si llegamos a tiempo de salvar tan extraordinarios batracios del cambio climático que nos acecha.
Antes de explicar como fotografiar ranas, vamos a conocer un poco como son. Anfibio; del griego dos vidas son los únicos animales capaces de vivir indistintamente en el agua y en tierra. Nacen en el agua de minúsculos huevecillos en estado larvario; son los renacuajos que respiran a través de las branquias, tal como va creciendo pierde la cola y desarrolla sus cuatro potentes patitas que le permiten dar saltos prodigiosos al tiempo que desarrolla sus pulmones que le permitirán respirar en tierra. Aunque de adultas viven igual en tierra que en el agua, su verdadero mundo es el acuático. Se alimentan principalmente de insectos que persiguen sigilosamente, cuando están lo suficientemente cerca extienden su larga lengua que contiene una sustancia pegajosa en la que quedan atrapados; de ahí, directamente al estomago.
Tienen muchos depredadores, aunque debido a la gran abundancia de huevecillos que ponen las ranas, nacen en gran cantidad. También su capacidad de mimetizarse con el entorno las ayuda a pasar desapercibidas. Su mayor depredador es el hombre, debido a que en muchas culturas se las comen, son ampliamente perseguidas llegando hasta el exterminio. Ellas no tienen manera de defenderse de los llamados supuestamente “humanos”, cuando estos se establecen cerca de sus habitats tardan poco en desaparecer y si no ponemos remedio muy rápido el cambio climático con sus bruscos cambios de temperatura no tardara en exterminarlas totalmente. Ello seria terrible para el planeta, las ranas no molestan a nadie y son una extraordinaria herramienta para el control de plagas especialmente de dípteros. Después de estas breves e incompletas consideraciones, estoy seguro que la primera vez que encontremos unas ranas en un estanque las miraremos con mucho mas respeto.
¿Dónde encontrarlas? Donde haya agua; balsas, estanques, charcos y ríos poco profundos. Requieren de un agua templada y aceptablemente limpia, por lo que es mas fácil encontrarlas en primavera y verano. Para fotografiar renacuajos lo mejor es usar la pequeña cámara compacta sumergible, ello nos permitirá fotografiarlas tanto dentro del agua como cuando asoman la cabeza a la superficie.
La técnica; muy similar a los cangrejos de rió. Adentrarse en el agua con el sol a la espalda observando muy lentamente entre las piedras del fondo; se acostumbra a pegar a ellas. Si avanzamos lo suficientemente despacio para no alarmarlos, los pequeños renacuajos nos permitirán acercarnos lo suficiente e incluso poner las manos bajo el agua con la cámara para captarlos en su elemento.
Las ranas adultas pueden ser algo mas complicadas de inmortalizar, si están en tierra tienen la costumbre o inteligencia después del trato recibido por el hombre de saltar inmediatamente al agua tan pronto como aparecemos en su campo visual y no sirven de nada nuestros argumentos que vamos en son de paz y solo queremos fotografiarlas. Hay que cambiar de táctica.Aquí si es útil una cámara reflex con un objetivo de 300 o 500 mm. También puede servir una compacta pseudo reflex con una larga focal equivalente. En primer lugar hay que encontrarlas, para ello en muchas ocasiones será mas útil el oído que la vista, pues sobre todo a primeras y ultimas horas del día se ponen a croar, son los tenores de la naturaleza. Cuando las avistamos; acercarnos a una distancia prudencial. ¿Cual es esta distancia? Pues la mas corta posible antes de que se escondan, por ello es útil un buen tele objetivo que nos permita fotografiarlas en primer plano a una distancia de cinco o seis metros.
Dado que cuando las avistemos tendremos poco tiempo para disparar, es conveniente llegar con la cámara preparada, preferentemente en modo apertura, seleccionar un diafragma bajo como un F5,6 por ejemplo que nos de una velocidad de 1/1000 o superior ya que con estas focales largas el riesgo de mover la foto es alto.
Con estas breves consideraciones, estamos listos para fotografiar a nuestros amigos los anuros. Antes de acabar este capitulo recordemos lo antes explicado. Están en peligro de extinción debido al calentamiento global, a la desaparición de sus habitats y a la persecución a que son sometidas con fines comerciales. Defendamos las zonas húmedas que aun existen, tratémoslas con todo el respeto que se merecen; solo así conseguiremos que no pasen a englobar la larga lista de especies que ya hemos conseguido extinguir.
