COSAS DE LA VIDA

Si por incompetente se supone a aquel que es incapaz de asumir sus funciones, tal vez los padres de hoy somos un poco incompetentes.

Somos incapaces de calmar los lloros nocturnos de nuestros hijos, de acunarlos y cantarles, no aguantamos el mal dormir, creemos que los niños deben dejarnos dormir tranquilos, y les aplicamos el método estivill, que consiste en "que llore, ya se dormirá".

Nos autocompadecemos constantemente, quejándonos de lo cansado que es cuidar de un niño, de lo "liados" que vamos.

Somos incapaces de dejar de hacer cosas para estar con nuestros hijos, si el niño se mueve más que nosotros ya es movidito, y lo aplacamos con televisión, "mientras ve la tele, me deja tranquila". Que levante la mano la familia que no tenga una colección de videos infantiles para casos de emergencia, es decir, para cuando el niño no come, para cuando llora, se enfada, no me deja hacer lo que yo quiero,... para cuando el niño hace lo que hacen los niños.

Les apuntamos a clases de inglés para que sepan idiomas, que hoy en dia es muy importante para labrarse un futuro, pero somos incapaces de enseñarles los valores necesarios para acercarse a la felicidad.

No podemos acordarnos del pasado, de que de niños nos gustaba pisar los charcos, mirar las piedrecitas y sentirnos especiales. En la consulta del pediatra sólo oigo "vas a cobrar", "te vas a caer y te voy a pegar", mensajes que ningún adulto aguantaría a otro semejante.

Toda esta inutilidad la tapamos con cosas materiales, intentamos disimular nuestra incompetencia.