Paseo Fotográfico – Riera – Santa Maria d’Oló – Plaça Catalunya – Serrat del Segimon – Riera d’Oló – Font del Roc – Les Marrades – Molí d’Altimires – Vinyes del Trabal i de l’Andreu – Aiguamolls Salins – Sant Joan Vell d’Oló – Cingle del Plans – Barraca del Peino – Molí del coix – Vinya del Met – Vinya d’en MIquel – Serra Borina – Santa Maria – Església vella Santa Maria d’Oló – Castell d’Oló – La Sauleda

Font del Roc

Riera d’Oló – Afluente, por la izquierda, de la riera Gavarresa, que nace en el altiplano del Moianès, en la vertiente norte del puig de Rodors, dentro del término de L’Estany (Bages). Después de atravesar un pequeño sector del municipio de Muntanyola (Osona), pasa por los pueblos de Sant Feliuet de Terrassola y de Santa Maria d’Oló y por debajo del de Sant Joan d’Oló (Bages) y desemboca en su colector cerca de Santa Maria d’Horta.

Molí del coix

Se empieza ha caminar por la Riera d’Oló, situada en la parte baja del pueblo, en poco rato llegamos al primer punto de interés de la ruta de hoy, se trata de la Font del Roc, un lugar fresco y agradable con buenas vistas del cerro del poble vell, el arroyo sigue por un valle escoltado entre dos cordilleras. En la primera parte del itinerario se pueden encontrar varias barracas de piedra seca, el Molí d’Altimires, en estado ruinoso y la falla tectónica, de pared vertical, llamada els Plecs de la Serra Borina.

els Plecs de la Serra Borina

Siguiendo el camino del arroyo, que cruzaremos varias veces, haremos al final a una curva de casi 180º y en un pequeño cerro están las ruinas de Sant Joan Vell d’Oló. Buena parte del camino vamos a ir de un lado al otro cruzando la riera, tiene un caudal pequeño pero respetable y el camino se cruza bastantes veces con ella. En el itinerario podemos disfrutar de espacios de interés natural, donde contemplar bonitas panorámicas, masías rodeadas de prados, bosques de diversa vegetación, en un medio de paz y tranquilidad.

Molí d’Altimires

Santa Maria d’Oló – se encuentra en el Noroeste del Moianès. Tiene una superficie de 64,24 km2. La altitud máxima se sitúa entre los 900 y los 950 metros en la serralada de Font Freda y la mínima, lindando con Aviñón, entre los 200 y los 250 metros. El pueblo se encuentra asentado en una altura de 542 metros. Este municipio se formó en la colina ocupada por el castillo y la antigua iglesia, y hoy se ha extendido y comprende els ravals de la Rovirola y de Santa Eulàlia.

Barraca del Peino

Pertenecen al término d’Oló, la antigua masía de Rocabruna y la quadra del Solà de Sant Esteve y la parroquia de Sant Joan d’Oló. La red hidrográfica básica la constituyen la Gavarresa, la Riera d’Oló y la de Malrubí. Las primeras noticias del término datan del año 889 y el 930 se menciona por primera vez el castillo. Después de extinguido el linaje de los Oló y de diferentes ventas, el castillo pasó a depender del año 1364 del Monestir de l’Estany. A pesar de los diferentes intentos por parte de la gente d’Oló de redimirse del dominio del monasterio, la redención efectiva no se llevó a cabo hasta el 1597. Respecto a la actividad económica, destaca el desarrollo de la industria de la lana y el oficio de peletero a partir del siglo XVII. En la agricultura, el cultivo de la vid tiene una gran relevancia hasta el paso de la filoxera.

Sant Joan Vell d’Oló – La vieja iglesia parroquial de San Juan de Oló, se levantaba sobre una colina, cerca del mas Armenteres, junto a la riera d’Oló, era un edificio románico notable, del cual quedan los muros, sin vuelta, que muestran arcos lombardos y una notable perfección, es una construcción románica, de la segunda mitad del siglo XI, de una sola nave con ábside a levante. Aunque este en ruinas, el ábside conserva arcadas lombardas y lesenas, características de ese tipo de construcciones. 

Esta documentada desde 1136 y se abandonó en 1643, cuando se inauguró la nueva iglesia. La actual iglesia de San Juan de Oló fue bendecida el 25 de agosto de 1639, fecha muy cercana a la degollación de Sant Joan Baptista, titular de la parroquia. El 1643 se trasladó el Santíssim Sagrament desde la iglesia vieja. Fue a partir de este momento que el nuevo edificio asumió todas las funciones parroquiales. La nueva iglesia parroquial de San Juan de Oló se debió edificar porque la iglesia vieja, conocida popularmente como  Sant Joan Vell,, además del dificil acceso, debía haberse convertido pequeña debido al crecimiento demográfico de la zona.