Resulta interesante de tarde en tarde pasear por las ciudades y comprobar a través de sus edificios y calles como la historia va dejando su huella. Sabadell es una de esas ciudades que el pasado esta escrito en las paredes y también como no el presente va dejando edificios singulares que significaran igual que los mas antiguos un pedazo de historia y un reflejo de los tiempos.
Sabadell en la época moderna (siglos XVI-XVIII) – Las primeras casas fuera del perímetro enmurallado de la ciudad se empezaron a edificar a partir del siglo XVI. La villa continuó creciendo durante el siglo XVIII. De una superficie de 37.900 metros cuadradados en el siglo XVI, se llega a los 78.272 m2 en el siglo XVIII. La industria textil más importante durante los siglos XVI, XVII y XVIII fue la lanera, seguida, a mucha distancia, por la del tejido de lino. En 1559 se creó el Gremio de Pelaires (más tarde denominado Gremio de Fabricantes) a fin de establecer las reglas del oficio y favorecer el crecimiento de la actividad textil.
Siglo XIX, de villa pasa a ciudad industrial – La ciudad pasó de los 2.000 habitantes de principios de siglo a los 23.044 (censo de 1897). El carácter industrial de Sabadell se vio reforzado durante este siglo, en el que destacan diversos acontecimientos como la instalación de la primera máquina de vapor en una fábrica textil (1838) y la fundación de la Sociedad de Amantes de la Agricultura y la Industria de la villa de Sabadell, que se preocupaba del abastecimiento de agua para la industria y la población, tema siempre grave en Sabadell. Durante la segunda mitad del siglo la villa vio la llegada de la línea de tren que la conectaba con Barcelona, se instaló el alumbrado público en las calles céntricas (primero de gas y más tarde eléctrico) y se hicieron las primeras alcantarillas. Dos instituciones financieras nacen durante la segunda mitad del siglo: la Caixa d’Estalvis de Sabadell (1859) y el Banc de Sabadell (1881). En el ámbito cultural, cabe destacar la renovación del Teatro Principal (1866) y la fundación de la Academia de Bellas Artes (1880). En el año 1877, Sabadell obtuvo el título de ciudad. En aquel momento contaba con 18.000 habitantes aproximadamente, un número que fue creciendo con la inmigración procedente del resto de Catalunya, de Alicante, Murcia y València. La actividad económica se mueve básicamente en torno a la industria textil.
1900-1979, el gran crecimiento y la crisis – El siglo XX es el del gran crecimiento. Los 182.012 habitantes de 1975 casi multiplican por ocho la población del 1900, que era de 23.294 ciudadanos. Durante el siglo XX, Sabadell experimenta un fuerte impulso industrial, sobre todo en el textil y la metalurgia, y moderniza su economía con los servicios. Algunos edificios emblemáticos de la ciudad se construyen durante la primera mitad del siglo: los edificios modernistas del Hotel Suizo (1902), del Despacho Lluch (1908) y de la Caixa d’Estalvis de Sabadell (1915), y también la Torre del Agua (1918) y el Mercado Central (1930), entre otros. La crisis económica de los años setenta afecta a numerosas empresas de la ciudad, que acaban cerrando sus puertas.
De esta historia, aqui resumida, quedan como testigos edificios emblemáticos tales como: Hotel Suizo (1902) – Casa Taulé (1904) – Despacho Lluch (1908) – Edificio Obra Social Caixa de Sabadell (1910) – Edificio Caixa de Sabadell (1915) – Torre de l’Aigua (1918) – Teatro Municipal La Farándula (1956) – Casa Duran (siglo XVI) – Pou de Gel de Sant Oleguer (siglo XVII) – Conjunto de viviendas de la c. de Sant Antoni y vivienda de la c. de la Borriana (siglos XVI-XVII) – Campanario de Sant Fèlix (siglo XVIII) – Casa Antoni Casanovas (Museu d’Història) (1859) – Ayuntamiento de Sabadell (1872) – Gremio de Fabricantes (1883) – Estación de tren (1889) – Torre Gorina (1889) – Casa Ponsà (1891), etc etc …
Seguid el plano y disfrutad de la ruta, aproximadamente 13 km ida y vuelta.