Los sofás deslizantes han llegado para quedarse. Prácticos, cómodos y estéticos, reúnen las cualidades que todos buscamos a la hora de comprar un sofá.
Seguramente hayas escuchado hablar sobre este tipo de sofás, pero quizá te surjan algunas dudas acerca de su mecanismo, tipos y características. Si estás pensando en comprar un sofá para el salón, no dudes en considerar un sofá deslizante.
A continuación, te explicamos qué es un sofá deslizante y por qué deberías apostar por este tipo para disfrutar del mejor descanso posible.
¿Qué es un sofá deslizante?
Empecemos por lo básico: ¿qué es un sofá deslizante? Los sofás deslizantes son aquellos muebles destinados al descanso y el confort que han sido dotados de una serie de guías y mecanismos que permiten que, sus asientos, sean extensibles.
Estas guías están enganchadas a los diferentes asientos por lo que, lo único que hay que hacer para agrandarlos, es extraerlos hacia adelante. De esta manera, se puede ajustar la longitud a la altura de cada persona.
Así, los sofás deslizantes aportan un extra de comodidad, ya que se ajustan a la posición idónea para cada uno. Al agrandar el asiento, los sofás deslizantes actúan, también, como cama, resultando muy prácticos y funcionales.
Ahora bien. Como en cualquier otro tipo de sofá, puedes encontrar una gran variedad de tipos y diseños. Por lo que habrás de tener claro qué tipo de sofá deslizante se ajustará mejor a tus necesidades y a las de tu hogar.
Si quieres conocer los factores que has de tener en cuenta para elegir el mejor sofá deslizante para ti, no te pierdas los consejos del interesante artículo que encontrarás en Axarquiaplus.
Sofás deslizantes cortos vs sofás deslizantes largos
Atendiendo al sistema de apertura, puedes encontrar sofás deslizantes cortos, los más tradicionales, y los deslizantes largos, un tipo novedoso y cuya popularidad no deja de crecer.
Sofás deslizantes cortos
El tipo más convencional de sofás deslizantes es el que se corresponde con el extraíble corto.
Los asientos de los sofás deslizantes cortos llegan a sobresalir entre 35 y 40 centímetros, por lo que constituyen la mejor opción para las estancias de tamaño reducido. Además, son más económicos que los deslizantes largos.
Sin embargo, no ofrecen el mismo grado de confort pues, con los asientos totalmente extendidos, los pies tienden a colgar.
Sofás deslizantes largos
Apoyados en el suelo, los sofás deslizantes largos suelen sobresalir hasta los 50 cm. Se trata del tipo más novedoso del mercado, el cual se está ganando un gran aprecio por parte de los consumidores debido a la comodidad que ofrecen.
Además, pueden ser utilizados como cama, por lo que muchos usuarios se decantan por esta opción ya que cubren ambas necesidades en un solo mueble.
Razones para comprar un sofá deslizante
Ahora que ya sabes qué es un sofá deslizante y qué tipos puedes encontrar en el mercado en base a su sistema de apertura, te contamos por qué deberías apostar por un sofá deslizante para tu hogar.
Son estéticos
El diseño innovador del que están dotados los sofás deslizantes, sin duda, supone un motivo de peso para incluirlos en los salones actuales.
Además de tener en cuenta aspectos claves a la hora de comprar un sofá deslizante, como el número de asientos, el tipo de tapizado o si prefieres un de mecanismo manual o eléctrico, es innegable que el factor estético es crucial a la hora de elegir el sofá.
Apenas requieren mantenimiento
Pese a lo que pueda parecer, los sofás deslizantes apenas requieren de un extra de mantenimiento en comparación con un modelo de fabricación tradicional.
Por lo que respecta a la limpieza, suelen contar con piezas desmontables. Del mismo modo, los tapizados suelen ser removibles, para poder lavarlos cómodamente. Únicamente habrás de tener en cuenta el tipo de tejido.
Extra de confort
Quizá su característica más evidente y que más justifica la elección por parte de los consumidores.
La posibilidad de poder extraer los asientos e, incluso, reclinar los respaldos, constituye una razón de peso para su compra. Ambas opciones juntas hacen, de los sofás deslizantes, el tipo más cómodo de los que actualmente pueden encontrarse en el mercado.
Se adaptan al espacio
Necesites un sofá de mayores o menores dimensiones, tendrás ambas posibilidades en un único mueble: un sofá deslizante.
Este tipo de sofás se adaptan a la perfección al espacio del que disponen. Puedes decantarte por extraer a la mitad los asientos, por completo o, simplemente, extraer uno de ellos, disfrutando, en este último caso, de un cómodo chaiselongue.
Pueden usarse como sofá cama
Los sofás deslizantes son una de las opciones más escogidas, no solo para el salón sino, también, para la habitación de invitados.
Al ser deslizantes, dispones de una base mucho más amplia que en el caso de los sofás convencionales. Con un sencillo movimiento, conviertes tu sofá en una cómoda cama para tus visitas, ahorrando espacio y ganando en practicidad y confort.
¿Qué tener en cuenta a la hora de comprar un sofá deslizante?
Llegados a este punto, seguramente estés 100% convencido de comprar un sofá deslizante. Si es así, ten en cuenta estos factores para acertar en tu compra:
Plazas del sofá deslizante
Los sofás deslizantes pueden ser de 2 a cuatro plazas. Has de tener en cuenta, no solo del espacio del que dispones sino, también, del número de personas con las que convives. Una buena opción sería combinar un sofá deslizante de 2 plazas con un sillón relax.
Tipo de tapizado
La elección de los materiales es de suma importancia, especialmente si compartes tu hogar con mascotas o si tienes hijos.
En tal caso, los tapizados antimanchas serán tu mejor opción para mantener tu sofá deslizante como nuevo por más tiempo. También podrás encontrarlos en cuero, polipiel, de algodón, de terciopelo… ¡las opciones son prácticamente infinitas!
¿Manual o eléctrico?
En este caso, es cuestión de valorar si un extra de confort compensa una inversión económica mayor.
Por lo general, los asientos de los sofás deslizantes están dotados de una apertura suave y fácil, por lo que no requiere de grandes esfuerzos disfrutar de su naturaleza extraíble. Aunque todo dependerá de tus necesidades o de las de tus convivientes.
Diseño
Por último, pero no por ello menos importante, has de tener en cuenta el diseño y el estilo del sofá para que combine a la perfección con tu salón, cumpliendo su papel como mueble de descanso, pero, también, como elemento estético.