PLACERES COTIDIANOS
Llevo unas semanas que el finde hago la lista de placeres que he tenido en toda la semana. No sé si es mi nuevo método para ser positiva o simplemente que cada vez soy más hedonista.
Por ahora, la palma se la lleva todo lo relacionado con la comida; comer huevos fritos con bacon, asar castañas, ir a comer con gente interesante, tomar un café con un amigo,... también tengo placeres bastante sosos, como quedarme embobada frente al fuego, otros más normales, como hablar por telefóno durante una hora con B. o nadar con aletas hasta que me falta la respiración.
Este finde hay modificaciones, sin quererlo he empezado a planificar los placeres de la semana que viene. De momento, tengo pensado subir a la ermita y quedarme ahí arriba una hora, y comprarme un gloss rojo (bad education o venetian, ya buscaré swatches).
Visto el resultado, creo que contabilizar las cosas buenas es útil, mucho mejor que las cosas malas.