Si en tu hogar cuentas con una piscina pero no está cubierta, ya es hora de que pienses en hacer esa inversión, pues sin lugar a dudas, esto permitirá que tu vivienda adquiera un mayor valor.
Puedes pensar en esta alternativa, ya que existen distintos tipos de cubiertas que en consecuencia variarán el precio de tu inversión y encontrar la adecuada para ti. Solo se trata de consultar modelos y precios y escoger la opción que mejor se adecúe a tus necesidades.
Estamos seguros de que no te arrepentirás de hacer esta mejora en tu piscina, que se verá reflejada en el valor total de toda tu vivienda.
¿La piscina cubierta incrementa el valor de mi vivienda?
Muchas personas a la hora de comprar una vivienda verifican si tiene o no piscina. De hecho, los expertos de plataformas como Fotocasa o Idealista, afirman que el hecho de contar con una de ellas, atrae a los compradores. Si se trata de familias con niños de mediana edad, esto les parecerá tentador.
Afirman también que las piscinas cubiertas alejan la percepción del riesgo de accidentes en los compradores, y son vistas como un plus de comodidad y prestigio que hace que estas viviendas sean muy valoradas. Este es el caso de familias con niños son pequeños. Aquí la cubierta de este espacio pasa a jugar un rol fundamental.
¿Cuáles son las cubiertas más recomendables para mi piscina?
Existen distintos tipos de cubiertas para piscinas, y deberás elegir la que más se adapte a tu propósito y necesidad.
Las más económicas son las cubiertas de invierno que protegen el agua a nivel térmico y evitan el crecimiento de algas. Son cubiertas de seguridad principalmente y resultan algo pesadas.
Dentro de estas encontramos las cubiertas de redes de hojas, que es una cubierta tipo red que está estrictamente diseñada para proteger la piscina de que las hojas de los árboles caigan en ellas. También impide que objetos grandes caigan en la misma. Son más ligeras que las cubiertas de invierno convencionales.
Las cubiertas bajas son estructuras que te permiten proteger y tapar tu piscina de una forma bastante económica. Son recomendadas en tamaños reducidos y existen modelos telescópicos o elevables y sin carriles. Se elaboran principalmente en aluminio y paneles de policarbonato. Consiguen elevar la temperatura del agua entre 8 y 12ºC.
Las cubiertas altas, te permiten utilizar tu piscina en cualquier época del año, incluso mientras llueve. Presentan estructuras fijas, elevables, telescópicas y desmontables. También las hay sin carriles y sin perfiles, e incluso adosadas a un muro.
En ellas te olvidas de los efectos perniciosos de los rayos solares. Son una gran alternativa para disfrutar de un agua y un ambiente templado todo el año, permitiendo una zona de ocio y confort que hará que no quieras dejar el jardín.
¿Por qué debo invertir en una cubierta para mi piscina?
Las cubiertas de la piscina aportan la seguridad y la protección que deben tener estos espacios. Permiten también ahorrar en costes de mantenimiento. Tienen el valor añadido de permitir el baño en cualquier época del año. Y además, incrementar el valor de tu propiedad y permite una venta más rápida en caso de que esa sea tu opción.
Así que solo se trata de elegir la opción que más te convenga por el espacio que tienes, la dimensión de tu piscina y en base a tu presupuesto. ¡No te arrepentirás!