Este recorrido nos permite conocer uno de los elementos característicos del Parque Natural de Montnegre i Corredor: el Dolmen de Pedra Gentil. También conoceremos el Bosc de la Puig, muestra del bosque característico del término de Vallgorgina, donde hallaremos rastros de la actividad humana. Sin olvidar Santa Eulàlia de Tapiolas, que muy a pesar nuestro presenta un aspecto bastante ruinoso.
El itinerario empieza en la calle Montseny, después de pasar el puente de la Riera de Vallgorgina.
Al cabo de unos minutos encontraremos la señal de una fuente a la izquierda. Si lo seguimos llegaremos hasta la Font d´en Nel, bello paraje con abundante vegetación. Volvemos al camino inicial hasta que encontremos una bifurcación y seguimos el camino de la derecha. Iremos bordeando el flanco de la montaña en suave ascenso.
En la siguiente bifurcación, tendremos que seguir hacia la derecha (por la de la izquierda se sigue el GR92). El camino está bordeado por alcornoques en cuyo tronco podemos ver restos de la explotación humana sostenible. Llegamos a una pista forestal y continuaremos a mano derecha para poder visitar el Dolmen . Como la pista es transitable con vehículos privados, podemos encontrar cierta masificación humana.
Mirando hacia el oeste desde el dolmen se divisa nuestro siguiente destino: el campanario de Santa Eulàlia de Tapiolas. Después de visitar el dólmen seguiremos la pista forestal hasta que un desvio hacia la derecha nos indicará la iglesia, que vale la pena visitar. Aunque está en ruinas, su aspecto es muy evocador ya que se encuentra en mitad de un paraje arbóreo. Está documentada desde 878 y es de origen románico. Según dicen en el pórtico medio se puede ver una extraña cruz que durante mucho tiempo se utilizó par espantar a las brujas de las cercanías y las del Montseny.
Volvemos otra vez a la pista y ascendemos en medio de encinas, alcornoques, pinos y robles hasta llegar al Pla, dominado por el Mas de Can Pradell, donde se pueden degustar torradas, etc… Seguimos por la pista y en unos minutos encontraremos un desvío hacia la izquierda. Se trata del camino que lleva hacia el Santuario del Corredor por el Gr 92. Nosotros seguimos hasta encontrar una nueva señal de color azul.
Pasaremos por un bosque mixto (Bosc de la Puig), donde se mezclan varias especies alcornoques, robles y pinos, con predominio de unos u otros según la intervención humana y la orientación. Así en las zonas más umbrías hay alcornoques, encinas y robles mientras que en las zonas más soleadas nos encontramos más abundancia de pinos piñoneros.
El camino continúa por una tupida zona umbría hasta que después de una serie de zig-zags se abre a la luz. Seguimos por la cresta, encontrándonos a mano derecha Can Clarens. En un rápido descenso iremos a parar delante del puente de la Riera de Can Vilar, que atravesamos para volver al núcleo de Vallgorgina.