El bloc del Joan Ruiz

Madrid, EFE La totalidad de los grupos políticos presentes en el Congreso han instado hoy al Gobierno a actualizar la Estrategia Nacional para el control de una especie invasora altamente dañina, el mejillón cebra, "mediante el consenso y la participación".

Así lo ha aprobado hoy la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento a raíz de una Proposición no de Ley presentada por el Grupo Popular, que ha defendido el diputado Juan Bertomeu.

El parlamentario ha alegando que el mejillón cebra (Dreissena polymorpha) es el "paradigma de especie invasora", debido a la rapidez de su expansión y a los daños económicos que provoca, y que está catalogado como una de las cien invasoras más perjudiciales del mundo.

Este molusco bivalvo de agua dulce, de aspecto similar a los mejillones marinos salo por sus bandas blancas y oscuras en zigzag de las que deriva su nombre, comenzó a invadir la cuenca del Ebro a comienzos de este siglo, expandiéndose pronto por las del Júcar y Segura.

Como se ha recordado hoy en la comisión, el mejillón se dispersa con gran facilitad por la movilidad de sus larvas, y se disemina fácilmente a través de la vegetación o restos flotantes, adheridas a las embarcaciones, mientras navegan, en el agua de lastre, o aguas que llevan las cubas de transporte de otros peces, o canalizaciones.

Allá por donde pasa arrasa "con toda la fauna y flora silvestre alterando los ecosistemas y creando desequilibrios ecológicos", ya que "cubre y tapiza todo el sustrato que encuentra a su paso, llegando a obstruir tuberías, cañerías, conductos de agua o destrozando el fondo de los ríos por la acumulación de ejemplares muertos", ha detallado Bertomeu.

El mejillón cebra es transmisor de enfermedades que afectan a diversas especies de peces; y los estudios y la experiencia en otros países ponen de manifiesto que, una vez instalada, es prácticamente imposible su erradicación del espacio invadido.

El anterior Gobierno socialista aprobó en 2007 una estrategia para controlar esta especie invasora, pero los grupos han coincidido hoy en que urge implementar las medidas de la misma para "extender la protección a las zonas todavía no afectadas, y detener la proliferación en aquellas donde ya está presente".

A día de hoy, esta especie invasora está ya en la muy cercana a la cabecera del Ebro, se mantiene en toda la cuenca, y abunda también en la del Segura y en los embalses del Júcar en Valencia.

A pesar de que el resto de grupos se han unido al PP en esta propuesta, el diputado de la Izquierda Plural, Alvaro Sanz ha lamentado que se tarde ocho años en revisar esta estrategia, a pesar de que el plazo para hacerlo fijado en la misma era de tres.

Además, ha dicho que el apoyo de su grupo no es una "carta blanca" para aplicar cualquier tipo de medida en la radicación del mejillón invasor, como es el caso de mecanismos químicos que dejarían muy tocados los ecosistemas.

Aunque también se ha mostrado de acuerdo con la iniciativa, el diputado socialista, Joan Ruiz i Carbonell ha acusado al Grupo Popular en el Congreso "de hacer el ridículo" al utilizar sus proposiciones no de ley para pedir al Gobierno lo que tendría que hacer, o ya está haciendo

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