El bloc del Joan Ruiz

La mitad de las empleadas del hogar de la provincia trabajan sin cotizar

En la demarcación hay 3.287 empleadas domésticas cotizando en la seguridad social. 0tras 3.000 forman parte de la economía sumergida

Octavi Saumell - Tarragona - 03/08/2008

Sólo la mitad de las trabajadoras domésticas de la demarcación de Tarragona están afiliadas a la seguridad social. Estos son los cálculos que maneja a día de hoy el ejecutivo central de cara a regularizar, a lo largo de esta legislatura, la situación de estas empleadas del hogar, la gran parte de las cuales (el 97%) son inmigrantes, mayoritariamente procedentes de Colombia, Ecuador y Rumania.
Según los datos del pasado 30 de junio, en la provincia hay 3.287 empleadas que cotizan, una cifra que representa un incremento del 3% respecto a las 3.181 que lo estaban a finales de 2007. Estos números, sin embargo, son inferiores a las 4.197 que se registraron tras el proceso de regularización del 2005, año en el que se aumentó en un 237% el número respecto a las 1.765 de 2004.

Un Real Decreto insuficiente    
El pasado mes de enero, el ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE) puso de manifiesto su compromiso de reformar la situación laboral y de incluir en el Régimen General de la Seguridad Social a las empleadas del hogar.
La Plataforma Estatal de Asociaciones de Trabajadoras del Hogar denunció entonces las condiciones de «explotación» en que muchas veces se encuentran estas personas, que llegan a estar internas en un domicilio ofreciendo disponibilidad las 24 horas a cambio de un salario que no llega a los 300 euros mensuales, ya que tanto el Régimen de Seguridad Social que establece sus condiciones de empleo como el Real Decreto de 1985 que lo regula, no protegen al colectivo. «El nivel de prestaciones está muy por debajo del de otros sectores.
El Real Decreto es una ley que permite el contrato verbal, con las dificultades que conlleva; permite que las jornadas se alarguen sin límite horario; permite que hasta un 45% del salario se esté pagando en especies y reconoce el despido libre por desistimiento», aseguró en enero la portavoz de la entidad, Liz Quintana.
En cuanto al régimen de Seguridad Social, el colectivo ha denunciado en reiteradas ocasiones que «las trabajadoras tienen que darse de alta y cotizar toda la cuota, que es única y fija independientemente de las horas trabajadas; penaliza el pluriempleo; no reconoce derecho a subsidio por desempleo y, en caso de baja laboral, no se da prestación económica hasta pasados 29 días».

Igualdad efectiva y total
El diputado del PSC por Tarragona Joan Ruiz manifestó al Diari que en cuanto se regularice completamente este sector, «permitirá que el número de cotizadoras de estas empleadas se duplique en la demarcación». Entonces, estas empleadas podrán contar con un contrato de trabajo indefinido y tener derecho a paro. 
Según el político socialista, «el objetivo es lograr la igualdad total y efectiva de los trabajadores, dignificando sus condiciones laborales. No puede ser que actualmente sólo dependan de un contrato verbal y que no puedan recibir prestaciones cuando estén de baja».

‘Llegué a ir a 7 casas’
T.M.M. ha sido empleada del hogar durante siete años, pero ahora está de baja. Explica que «normalmente quien trabaja de esto es porque no tiene nada más». La ex empleada doméstica indicó que «llegué a ir a siete casas por semana. Hacía 72 horas al mes a unos diez euros a la hora», recuerda. 
Posteriormente se puso enferma, «y ya me fue completamente imposible poder cumplir». Precisamente por esta circunstancia, y ante las pocas ayudas que recibió, «estuve un mes en el hospital sin cobrar nada. Si nos aseguraran todo iría mucho mejor», reivindica.
Recientemente, las principales asociaciones de empleadas del hogar de España reclamaron que la reforma de la actividad dentro de este sector limite su jornada laboral a 40 horas semanales, tanto en el caso de las trabajadoras internas como de las externas, y que se reconozca su derecho a percibir una prestación por desempleo.