ESPERANDO LLAMADAS
Es curioso como se pierden amigos por no llamarse. Y a medida que se cumplen años, la lista de amigos pérdidos por una no-llamada crece. Él no te llama, pues hasta que no me llame yo no llamo, y ahora ya hace un año, me da vergüenza llamarlo, y así se perdió una amistad. Otra a la lista, hasta que un día, con 50 años, te llamen de un programa de la tele.
-"Hola, la llamamos de la tele. Su amiga Paquita, a la que hace 30 años que no ve, la está buscando, nunca se olvidó de su amiga del alma, y ahora quiere reecontrarse. ¿Quiere venir al programa para ver a Paquita?"-
Y digo yo, no es más fácil hacer una llamada que esperar 30 años para ir a la tele?