COLOMBIA - El tesoro Quimbaya
Figuras de la cultura Quimbaya. FOTO/Tomada de internet/Papel Salmón
Aún "piernipeludo'' a Jesús María Ocampo, le picó el deseo de buscar fortuna en otras tierras. "Oís, chuchito- le había dicho Danielito Escobar - qué te parece que están sacando oro en el Quindío por pilas; en una vereda que llaman Montenegro encontraron una sepultura con la pendejadita de setenta libras de oro. Yo vi unas alhajas, unos cetros y coronas, serpientes, lagartos y caciques, todo esto trabajado por los indios. En un lugar que llaman Tebaida están sacando tumbaga todos los días y a toda hora y los guaqueros viven muy animados porque dizque todo ese territorio es un cementerio tan rico, que por donde se mete el recatón y la mediacaña sale oro."
Un sepulcro continuo entre guaduales
El jovencito se
transformó en un hombre forzudo, mandón, guapo y con una puntería tal
que no hubo fiera que se le escapara, con razón lo llamaban el
'Tigrero'. En esa tierra úberrima y sin amos, Jesús María alternó con
desertores, con gente sin oficio ni beneficio y buscadores de fortuna
en torrenteras y collados, en vegas y en hondonadas, donde espantaban
alacranes y culebras para clavar la mediacaña y desenterrar las
riquezas que los indios confiaron por siglos a la madre tierra. El 'Tigrero'
al par con la fonda y con su sueño de la aldea en la "Cuyabra", alternó
los cultivos con la minería, dejando a sus amigos los tesoros de los
quimbayas. Cuando un enorme tronco le aplastó la vida en una veta
solitaria, los guaqueros encontraron su cuerpo y quizás su ánima, que
pese a la pesadumbre por una mujer ingrata, se negaba a alejarse del
Quindío.
El tesoro Quimbaya
Y era lógico que
se encontrara tan agradecida y sorprendida, pues el presidente
colombiano Carlos Holguín, le había regalado a la reina un fabuloso
tesoro de mil doce objetos arqueológicos y etnográficos, donde
sobresalían ciento veintidós figuras de oro, descubiertas en el
municipio de Filandia que representaban figuras femeninas y masculinas,
sillas, cascos y poporos, en tamaños entre quince y treinta centímetros
y pesos hasta de mil143 gramos de 24 kilates.
Una donación abusiva
Con el tesoro
Quimbaya y el resto de los valiosos objetos viajaron Vicente Restrepo y
su hermano Ernesto, historiador y especialista en cultura Quimbaya. Al
decir de Elvira Bonilla, Directora del Museo del Oro, tales
conocimientos no sirvieron a los Restrepo para hacer caer en la cuenta
a los generosos donantes sobre la magnitud cultural del regalo. El
semanario madrileño La Ilustración Española y Americana describió el
regalo como "el presente más valioso que España haya recibido hasta el
día, de ninguna de sus hijas allende del Atlántico".
Al rescate
El Alcalde de
Armenia, César Hoyos Salazar, la Academia de Historia del Quindío y la
Gobernación de ese departamento solicitaron a los presidentes de
España, José María Aznar y a su sucesor Rodríguez Zapatero, la
devolución del tesoro Quimbaya, sin que los europeos se hayan dignado
contestarles. Han buscado el apoyo de la Unesco, de los departamentos
del Viejo Caldas; los oficios de la Embajada en Madrid y hasta del
presidente Uribe Vélez.
*alcartob@gmail.com 5489&CODSEC=17