Edunáutic@

Imagina que eres docente en activo.

Un día recibes el correo de un compañero o compañera: «en tal web te evalúan tus estudiantes». Vas a la web, sí, para tu asombro, una evaluación anónima te da un suspenso en tu actividad docente, has salido malparado en categorías como «guay y divertido», «motivado», «humano» o «buen profesor», y en una escala numérica, la misma que se usa en tu centro, recibes un suspenso. Entonces te indignas y llevas a los propietarios de la web a un juicio que pierdes, recurres, vuelves a perder, llevas el caso hasta el Tribunal Supremo, y pierdes de nuevo. Esto es lo que le ha ocurrido a una profesora alemana, según se informa en Eurity y en el Times Online.

Si no eres profesora podrás imaginártelo pensando que tus clientes, tus visitantes, las personas a las que atiendes desde un mostrador o una oficina, o las personas para las que fabricas, cuelgan en Internet una valoración de tí cualquier día. (Más)

Un vídeo de formación es uno de los 20 vídeos más votados entre todos los publicados en Youtube (más 77 millones en marzo del 2008 según la Wikipedia). Es el titulado Cómo resolver el cubo de Rubik (How to solve a Rubik's cube #1 y #2). Por cierto que formación y formativo son términos más afortunados que instrucción o instruccional, calco innecesario del inglés.

Además de enseñar a resolver el problema del cubo de Rubik (cada una de las caras debe ser de un solo color) su autor (Dan Brown, que firma sus vídeos como «pogobat») enseña bien: con desenfado, de una forma estructurada, progresiva y dinamica muestra el cómo, lo necesario y las posibilidades que se encontrará el aprendiz.

A partir de este hecho, enmarcado por el fenómeno y el éxito de Youtube, me pregunto si estamos atisbando algunas características de la formación del siglo XXI:

1. El aprendizaje (y la enseñanza) de procesos primará sobre el aprendizaje de datos y conceptos. El conocimiento declarativo (el qué) se obtendrá con facilidad, será prácticamente ubicuo, y por tanto no tendrá un gran valor, mientras que el conocimiento procedimental (cómo hacer cosas, cómo obtener resultados) estará más disperso, más selecto, irá aumentando a causa de la innovación y por tanto será de gran valor. (Más)

Interesantes conceptos incluidos, entre otros, en el siguiente artículo de Fabricio Caivano, que recomiendo a los lectores de Edunáutic@:

> La estructuración industrial de la formación está en vías de desmoronarse por otra estructuración más acorde con la Sociedad de la Información, la Comunicación y el Aprendizaje.

> No se reemplaza al docente, sino que cambia su rol y su dedicación.

> Enseñanza y aprendizaje en colaboración y desde la autonomía del estudiante.

La educación del siglo XXII (El Periódico Mediterraneo, 29/01/2007)

El estudiante de oro, o el estudiante al que su propia web le impidió serlo.

En todo el mundo se ha publicado recientemente el caso de un estudiante británico, Alex Pew, que imaginó una forma de hacer dinero fácil y rápido, por medio de su web, para afrontar los gastos de sus estudios universitarios.

Aunque en el diario El País el artículo que recogía esta curiosidad se titulaba El píxel de oro, pudiera haber sido más acertado algo así como El estudiante que usó la Web de forma diferente y dejó de serlo.

He pensado algunas veces que la Red y sus posibilidades tecnológicas pueden ser un instrumento muy potente en la evolución hacia un mundo de personas mejores, hacia un mundo mejor que el de ahora.

La Educación es tan importante en la búsqueda y en la consecución de ese mundo mejor, que todos, desde el ámbito de cada uno, deberíamos aportar contenidos, acciones y reflexión a todos los que navegamos y nos encontramos por la Red, a los que aprendemos y ayudamos a aprender.

Edunáutic@ es una gota en el mar, donde habrá tiempo y lugar para divulgar y comentar acciones, noticias y hechos relacionados con la Educación desde la perspectiva de la Red y de las Tecnologías de la Información y del Conocimiento, es decir, desde una perspectiva humana.

Estás invitado, estás invitada, a participar.

Federico Borges Sáiz.