PATRIMONI HISTORIC i ARTISTIC


PERU - Descubren una tumba colectiva de 475 guerreros incas

noticies del mon - — Publicat per josep.m @ 19:02
Los arqueólogos examinan una de las momias halladas en Puruchuco. (Foto: Universidad Católica de Lima)

Los arqueólogos examinan una de las momias halladas en Puruchuco.

(Foto: Universidad Católica de Lima)

  • El hallazgo se logró de forma casual durante las obras de ampliación de una avenida
  • Los cuerpos pertenecían a varones cuyas edades oscilaban entre 18 y 22 años
  • Sufrieron heridas que no pudieron ser infligidas por las armas rudimentarias de los incas

RAMY WURGAFT (Enviado especial)

PURUCHUCO (PERÚ).- Súbitamente, el capataz que dirigía las obras de ampliación en la Avenida Javier Prado, una de las principales vías de Lima, ordenó detener las máquinas. Al escarbar un promontorio, la pala mecánica había extraído varios cráneos y otros restos de osamenta humana.

Guillermo Cock se dirigió a toda velocidad al lugar del hallazgo y al examinarlo se sorprendió tanto como los asustados miembros de la cuadrilla. El arqueólogo no imaginaba que el cementerio inca de Puruchuco, que había investigado entre los años 1999 y 2001, pudiera extenderse hasta la mismísima zona residencial de la ciudad.

Las excavaciones de rescate, que comenzaron al día siguiente, dieron como resultado el hallazgo de 475 momias que se suman a las 1.836 que habían aparecido en las anteriores campañas. Pero a diferencia de aquellas, las más recientes estaban sepultadas casi a ras del suelo y en completo desorden.

«En esta ocasión los sepultureros hicieron el trabajo deprisa bajo la impresión de una catástrofe», relata Cock.

Había otras diferencias que capturaron la atención del investigador de la Universidad Católica de Lima y de su socia, Elena Goycochea. Las momias no estaban envueltas en fardos, como era la costumbre entre los años 1480 y 1535, durante el denominado horizonte tardío de la era incaica, sino en paños simples que los deudos ataron como si se tratase de bártulos.

Para mayor asombro, las osamentas presentaban severas heridas, que no podían haber sido infligidas por armas rudimentarias como las que poseían los incas. Indudablemente, esos antiguos peruanos habían muerto a manos de los conquistadores españoles. Las pruebas que se hicieron en el laboratorio determinaron que aquellos varones, cuyas edades oscilaban entre los 18 y los 22 años, fallecieron en 1536, el mismo año en que Manco Inca Yupanqui se rebeló contra Francisco Pizarro estableciendo un cerco en torno a las colonias hispanas de Lima y de Cuzco.

Cuerpos envueltos en fardos

Los cuerpos de los guerreros rebeldes, momificados por acción de la aridez del terreno y del clima, representan un testimonio elocuente de la feroz batalla que culminó con la derrota de los incas.

Las anteriores campañas revelaron la existencia de una práctica funeraria que no tiene parangón en ninguna de las civilizaciones antiguas. Los habitantes del litoral peruano, donde se encuentra el cementerio de Puruchuco, depositaban a sus muertos en grandes envoltorios rellenos de algodón, sujetos con una malla de esparto.

De los miles de fardos rescatados durante las primeras excavaciones, 52 correspondían a miembros de la nobleza sepultados de acuerdo con su rango: en posición fetal, a más de siete metros de profundidad, junto con un rico ajuar mortuorio (metido en la misma cápsula) que incluía tocados de plumas exóticas y conchas de 'Spondylus', cerámica ornamentada, etcétera.

El cementerio de Puruchuco es el más grande que se ha descubierto de las antiguas culturas de América. Se calcula que unos 10.000 cuerpos permanecen bajo tierra.


Los fardos señoriales estaban orientados hacia el noreste, en dirección al sol naciente; poseían una «falsa cabeza» hecha de algodón y también destacan por contener, además de la momia adulta, las de uno o más niños envueltos en sus propios fardeles.

Probablemente esas extrañas mortajas colectivas responden a la creencia de que el Señor era el guía de los pequeños en su tránsito a la eternidad. Guillermo Cock y su equipo atribuyen el desproporcionado número de niños en Puruchuco, a la elevadísima tasa de mortalidad infantil.

«En la zona costera, entre el 45% y el 48% de los habitantes no llegaba a la adolescencia. La hipótesis de que hubieran muerto de desnutrición no se sostenía puesto que en la época en que llegaron los españoles, la agricultura incaica producía excedentes alimentarios. Las pruebas del laboratorio resolvieron el enigma: esos chicos sufrían de parasitósis intestinal», dice Cock.

El sitio de Puruchuco marca un hito en la investigación de las antiguas culturas de América. No se ha descubierto un cementerio que se le iguale en el número de individuos inhumados dentro de sus límites. Cabe señalar que, según los cálculos de los investigadores, unos 10.000 cuerpos permanecen bajo tierra.

«Si los muertos eran traídos de otras regiones es porque Puruchuco debió ser un importante centro religioso. Pero no hemos encontrado nada que confirme esa hipótesis y es posible que nunca lo encontremos», dice Cock, apuntando con el dedo hacia una población de chabolas, de más de 12.000 familias, asentada en el área que aún no ha sido explorada. «La cruda realidad social del Perú se interpone a nuestro deseo de desentrañar el último secreto de Puchunco», concluye Cock.

El arqueólogo Guillermo Cock muestra el cráneo del rebelde inca con un impacto de una bala. (Foto: Universidad Católica de Lima)

El arqueólogo Guillermo Cock muestra el cráneo del rebelde inca con un

impacto de una bala. (Foto: Universidad Católica de Lima)

Un cráneo agujereado

Uno de los hallazgos que más sorprendió a este arqueólogo fue el cráneo perforado que le mostró uno de sus ayudantes, fue que las excavaciones que dirigía habían tocado su fin. «Como el agujero era de bala, supuse que se trataba de un homicidio reciente, o de una ejecución perpetrada en la década de los 90 por los terroristas de Sendero Luminoso. Como fuera, había que dar aviso a la Policía, y con los agentes husmeando en el cementerio, no se podría trabajar», relata el investigador.

Afortunadamente, otro arqueólogo encontró el resto del esqueleto, cubierto con los retazos de una vestimenta incaica. La víctima era un guerrero de las huestes de Manco Inca y el autor del disparo, un soldado de las tropas de Francisco Pizarro. El hallazgo llenó las portadas de los periódicos. Era la primera evidencia física que se obtenía de un amerindio alcanzado por la bala de un arcabuz español, durante la conquista del continente. En una conferencia dictada en la sede de la revista 'National Goegraphic', en Washington, Cock reconstruyó el violento episodio.

«Las pruebas balísticas indican que el rebelde, un joven de unos 18 años, de complexión media, recibió el impacto mientras caía al suelo, derribado por un golpe propinado con instrumento contundente (¿un mazo?) que le destruyó la parte inferior de la mandíbula. No sabemos si la bala que lo remató era una bala perdida o si el arcabucero tenía una excelente puntería», indicó el arqueólogo.

Todavía más cruel fue el final de un individuo a quien los investigadores bautizaron 'Mochito' (se les llama mochos en Perú, a las personas que han perdido sus extremidades). Los cascos de un caballo le habían aplastado el esternón; tenía amputada una de las extremidades y un dedo limpiamente seccionado. El cráneo presentaba tres orificio rectangulares, hechos con una pica.... «Los incas sucumbieron ante la superioridad tecnológica del arsenal hispano», concluye Guillermo Cock.

 

http://www.elmundo.es/elmundo/2008/01/27/ciencia/1201456688.html

El rostre desconegut però amb mil cares.. Llarga vida al rei Jaume

noticies de C A T A L U N Y A - — Publicat per josep.m @ 11:50

 

L'escut autèntic del rei, guardat al Museu Municipal de la Ciutat de València, a l'ajuntament.
 

 

Avui se celebren els 800 anys del naixement del rei més estimat en la mitologia dels Països Catalans, alliberador de València, conqueridor de les Illes, creador de símbols, protector d'animals, faldiller, atractiu... Un rei amb mil cares i més que se n'hi han posat

 

800 anys després, el rei en Jaume (1208-1276) mereix tots els respectes dels catalans, però també ja forma part de la quotidianitat. L'autocrítica pròpia del seu poble, el català, no ha permès que el monarca s'escapés de les conyes igual que passa ara als presidents Montilla, Maragall i Pujol a Polònia. Així, ja a principi del segle XX, el famós autor del menfotisme Serafí Pitarra va escriure la irreverent paròdia Don Jaume el Conquistador.

La lletra d'aquesta opereta burlesca i divertida va tornar a ser emprada en la transició democràtica per la Trinca, amb un afany normalitzador del país, que va fer mal a les oïdes més puristes. Ells ja ho advertien: «Aquest disc, per la seva temàtica o contingut, pot ferir la sensibilitat de l'oient llepafils.» Però, la veritat, entre la conya de Pitarra i la de la Trinca, més que ferir, el que fa la sarsuela rock és divertir i tractar de la conquesta de Mallorca i la reconquesta de Múrcia des d'un punt de vista ben peculiar, ben amanit amb el famós apetit sexual del monarca català i el del seu fill Pere i arrodonit amb el casament de Pere amb Constança de Sicília.

De fet, la sarsuela Pitarra-Trinca no diu cap bestiesa, si tenim en compte que Jaume I va tenir tres dones: Elionor de Castella, amb qui es va casar el 1221 i de qui es va divorciar el 1235; Violant d'Hongria, amb qui es va casar el 1235 i de qui va enviudar el 1251, i Teresa Gil de Vidaure, a la qual va abandonar quan aquesta va contraure la lepra. Sembla que també va tenir nombroses amants, entre les quals, Blanca d'Antillón, amb qui va tenir un fill bord; Berenguela Fernández, i Elvira Sarroca, amb qui també va tenir un fill bord. Quan va enviudar, el 1251, va tenir altres amants i concubines com ara Guillema Cabrera, Berenguela Alfonso, Sibil·la de Saga i Teresa Gil de Vidaure, que després va ser la seva dona.



LA CONCEPCIÓ DEL REI


Però l'aurèola de llegenda i l'anecdotari de la vida de Jaume I va més enllà que els de qualsevol gran personatge històric. La seva concepció ja va ser, per dir-ne d'alguna manera, força surrealista. Els pares de Jaume I eren el rei Pere el Catòlic i la reina Maria de Montpeller. Precisament vivien en aquesta ciutat occitana, però separats. La tradició faldillera de Jaume I li venia per via paterna. De fet, al seu pare li agradaven molt les dones, però la seva no. Per això, i en vistes que no hi havia descendència reial, els súbdits, amoïnats, van decidir preparar-los una trobada amb la idea que concebessin un fill. Amb el vistiplau de la reina, van enredar el rei, fent-li creure que una dama (la reina) volia passar una nit amb ell, però de manera anònima i a les fosques. Pere I s'hi va prestar ràpidament i, un cop van haver consumat l'acte sexual, van entrar a la cambra els mateixos súbdits que havien organitzat la trobada i ho van explicar tot al rei. Segons la tradició, al rei Pere li va semblar bé tot plegat, i així va ser concebut l'infant Jaume.

Una altra de les peculiaritats del rei Jaume, a part de ser faldiller, és que va ser el primer rei ecologista de la història. Si més no, va ser un protector de dos animals, el ratpenat, símbol català gràcies a ell, i l'oreneta. Dues anècdotes, en part semblants, se li atribueixen en relació amb la protecció d'aquestes bèsties.

 



LO RATPENAT


Quan el rei Jaume I va decidir envair València i prendre-la als sarraïns, el fet va tenir un altre gran protagonista: el ratpenat.

Hi ha diferents versions sobre la conversió en símbol d'aquesta bèstia. La primera és que les tropes catalanes tenien el campament a Russafa, i dins la tenda del rei un ratpenat va trobar el lloc per dormir. Jaume I, en veure'l, no el va fer fora, al contrari: va manar que ningú el molestés. En agraïment, aquest ratpenat es va convertir en el súbdit més patriòtic de tots.

La història va anar així: una nit el rei es va despertar en sentir un forts cops de timbal. En llevar-se, va comprovar que les tropes sarraïnes estaven a punt d'atacar-los per sorpresa. Després de la batalla que va permetre recuperar el Regne de València, Jaume I va demanar que es localitzés l'autor dels cops de timbal. Sorprès, va descobrir que havia estat el ratpenat, llançant-se contra el timbal, qui havia donat els cops fins a despertar-lo, i va decidir posar la bèstia dalt de l'escut de la ciutat.

Una altra versió fa que el ratpenat es converteixi en un salvador directe. Diu la llegenda que l'animal es va interposar en el camí d'una fletxa que anava de dret al cor del rei durant la batalla de València. Llavors, Jaume I també va decidir posar la bèstia dalt de l'escut de la ciutat de València.

 

LA ORENETA

Una altra bèstia protegida és l'oreneta, que, en versió similar a la del ratpenat, també va fer niu a la tenda del rei quan havien acampat al Puig, a punt de marxar sobre Borriana, també al País Valencià. El rei Jaume I, en veure-la, va manar que ningú la toqués, i que no es desmuntés la tenda, fins que l'ocell i els seus pollets en marxessin volant, segons es narra al Llibre dels feits. Jaume I ha estat mil i una vegades il·lustrat, però realment ningú sap quina cara tenia ni com era. Si ens hem de refiar de les cròniques de l'època, quan era petit el rei en Jaume «fo lo pus bell hom del món», deia Bernat Desclot. Cepat i alt, alguns parlen d'una alçada de gairebé dos metres. El que sembla força clar, malgrat que en molts retrats no se'l pinta així, és que era ros. De tota manera, la mitificació de Jaume I el presenta als catalans gairebé com un superheroi de l'edat mitjana. L'aproximació artística de Perich, per il·lustrar la sarsuela rock de la Trinca, és més realista, segurament, i més pròpia del rei en la seva maduresa. Similituds a part, Jaume I ha estat reproduït en un whisky, en una falla valenciana i en contes, rondalles i llibres d'història per posar rostre a un personatge de llegenda.
 
 
http://www.vilaweb.cat/www/elpunt/noticia?p_idcmp=2723220

Powered by LifeType